Sin salirse del plazo a pesar de las inclemencias del tiempo y de un incidente de última hora con la furgoneta que trasladaba su material, los seis aragoneses que partieron el 1 de octubre desde España rumbo a Escocia llegan hoy a la ciudad de Glasgow. Objetivo cumplido más de 1.000 kilómetros recorridos después y con la reivindicación de una actuación «urgente» contra la crisis climática por bandera. «Hoy nos uniremos con la columna del oeste, que son marchistas vinculados a la iglesia protestante, y entraremos con ellos en la ciudad», explicó ayer a este diario el aragonés José Luis Martínez, uno de los participantes en este proyecto.

El temporal les ha afeado gran parte del camino, pero el balance, según Martínez, es «muy satisfactorio» porque durante todo el recorrido han sido recibidos en numerosas ciudades por parte de alcaldes o personalidades, todos ellos concienciados con el medio ambiente y su reivindicación. «Hemos intercambiado opiniones no solo con gente de organizaciones, sino con políticos locales o nacionales, sobre todo del Partido Verde Europeo o laboristas. De los conservadores de Boris Johnson no se nos ha acercado nadie», decía Martínez con cierta ironía.  

Entrada 8 La expedición, a su llegada al territorio escocés. | SERVICIO ESPECIAL

Junto a los aragoneses caminan dos vascos y varios británicos, con quienes se encontraron en el camino. «Esta idea surgió hace dos años, durante la cumbre del clima en Madrid. Consideramos que fue un fracaso y una decepción porque los acuerdos de los partidos políticos no se llevaron adelante», argumentaba el aragonés. La pandemia les truncó su caminata en 2020, pero la mejora epidemiológica les hizo «lanzar este gesto» para «que no se diga que la sociedad civil no pone la carne en el asador y pelea por salvar el planeta. Los político deben dejar de marear la perdiz y ejecutar los acuerdos que se firmaron», insistió Martínez. El proyecto es internacional, ya que han sido varias las marchas que han partido en dirección a Glasgow en los últimos meses para llegar hoy a la ciudad escocesa.

Gran respuesta social

El aragonés explica que toda la coordinación «ha sido fundamental» para que el proyecto saliera adelante. «Partimos con todo muy organizado, tanto en lo logístico como en las comunicaciones. Hemos tenido recepciones en muchos ayuntamientos, actos públicos en la calle y diversas acciones a las que ha venido mucha gente. La respuesta ha sido buena», añadía Martínez.

Su movilización tiene la meta de sensibilizar a la opinión pública sobre la gravedad de la emergencia climática. Llegados a Glasgow, punto central de la cumbre de este año, sus acciones van a continuar. «Nos partiremos en dos grupos. La mitad vamos a regresar a España para la movilización del 6 de noviembre, en nuestro caso en Zaragoza. Otros, sobre todo los más bilingües, se van a quedar aquí para participar en las acciones del Reino Unido porque participarán en los trabajos de las diferentes secciones y en un debate final que habrá en una cumbre alternativa», explicó Martínez.