Las Cortes de Aragón dieron este jueves luz verde al techo de gasto de la comunidad autónoma para 2022, con el apoyo cerrado del cuatripartito (que ya tenía la mayoría parlamentaria asegurada) y el respaldo crítico de Ciudadanos, el voto en contra de Vox y las abstenciones del PP e Izquierda Unida, que reclamó de los socios de Gobierno un posicionamiento claro sobre una reforma fiscal que permita «redistribuir la riqueza y aumentar los ingresos». Pese al apoyo al techo de gasto, que permitirá presentar los presupuestos de 2022 «en breves fechas», avanzó el titular de Hacienda, PP, Cs y Vox dudaron de la previsión de crecimiento que dibuja el Ejecutivo.

Carlos Pérez Anadón recordó que la comunidad tendrá en 2022 el segundo techo de gasto más alto de la historia, con casi 6.080 millones de euros, solo por detrás del aprobado para 2021. Aunque el consejero reconoció el «clima de incertidumbre» que reina en la economía global, defendió que la aragonesa tiene mimbres para hablar de un futuro «prometedor». Los «activos» aragoneses que definió el consejero son la previsión de crecimiento del 7,1% del PIB en 2022; la presión fiscal en el 5,8% del PIB, «por debajo de la media española»; y una deuda autonómica que representa el 25,3% del PIB, también por debajo de la media estatal.

El titular de Hacienda defendió un techo de gasto «ambicioso y expansivo». Sin caer en la «autocomplacencia» y reiterando las llamadas a la «prudencia», consideró que estas cuentas permitirán «garantizar los servicios públicos y reconstruir los daños sociales y económicos causados por el virus».

Sin embargo, la portavoz de Hacienda del PP, Carmen Susín, denunció que la cuantía del techo de gasto «se calcula en base a unas previsiones poco realistas, que no tenían en cuenta el retraso en la entrada de los fondos europeos, ni el cuello de botella en la industria, ni el encarecimiento de las materias primas». Pese a todo, el PP se quedó en la abstención como un «gesto» para «dejar hacer» al Gobierno. La conservadora recordó que las previsiones de crecimiento han sido «rebajadas» por varios organismos, como la «Airef, el Banco de España, o el BBVA». «Pensar que se va a alcanzar un nivel de crecimiento del 7% lo vemos más como un intento de cuadrar las cifras», criticó. Similares argumentos presentó la diputada de Vox, Marta Fernández, que calificó el techo de gasto de «tomadura de pelo» y las previsiones de ingresos de «imprudentes».

Los ingresos

El portavoz de Hacienda de Cs, José Luis Saz, defendió que «el techo de gasto es mejor que peor, porque es el segundo más alto de la historia». Sin embargo, alertó de las «correcciones» que distintos organismos han hecho de las previsiones de crecimiento, lo que a su parecer puede acarrear «problemas en las conferencias sectoriales y se reducirán los ingresos de la comunidad».

Desde IU, Álvaro Sanz, criticó que el techo de gasto no refleje la voluntad del Ejecutivo autonómico de mejorar los ingresos propios a través de una reforma fiscal, y pidió a los socios de Gobierno posicionarse al respecto. «Si lo comparamos con el presupuesto de hace dos años, la capacidad ordinaria de los ingresos propios se ha reducido en 41 millones», lamentó, al tiempo que denunció que «las brechas sociales se han agudizado tras la pandemia», lo que requiere reforzar los servicios públicos.

El portavoz socialista de Hacienda, Óscar Galeano, reclamó de la oposición «seriedad» a la hora de hablar de previsiones. «¿Alguien hablaba de covid en 2019; alguien hablaba de la inflación hace un año? Seamos consecuentes. No podemos hacer previsiones a tiempo real», reprochó a los grupos de la derecha. Galeano incidió en que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) «avaló» las previsiones económicas del Gobierno de Aragón y aseguró que el próximo presupuesto se dedicará «a consolidar unos servicios públicos de calidad».

Desde el PAR, Jesús Guerrero, rechazó abordar ahora una reforma fiscal, como pedía IU, y defendió el «techo de gasto expansivo». Marta de Santos, portavoz de Podemos, se mostró favorable a una reforma fiscal «donde paguen más quienes más tienen», pero defendió que con los actuales presupuestos se puede ayudar a salir de la crisis. Carmen Martínez (CHA) puso el foco en «el problema estructural de la financiación autonómica insuficiente», pero defendió que con presupuestos como estos «le hemos puesto coto al virus».