Preservar la belleza paisajística del Alto Aragón es vital. Conservar el medioambiente es uno de los objetivos principales de Grhusa, compañía de capital público encargada de gestionar los residuos urbanos en los territorios de las comarcas del Alto Gállego, Hoya de Huesca y Jacetania, así como en las ciudades de Huesca, Jaca y Sabiñánigo.

El compromiso de la sociedad a favor del medioambiente es esencial para que Grhusa cumpla su razón de ser y dejar así a las generaciones futuras un mundo más limpio y sostenible, una de las metas de la empresa. Grhusa se consolida como una respuesta a la ciudadanía que aboga por la economía circular, proceso que desde la compañía facilitan y promueven a través de diversas acciones, como la recogida de residuos.

Para poder desarrollar esta labor es imprescindible un correcto depósito por parte de los habitantes. Realizar la separación de la basura en base a los materiales que admite cada contenedor (el azul para papel y cartón; el amarillo para envases de plástico, latas y briks; el verde para vidrio; y el verde oscuro o gris para el resto) es imprescindible para que cada residuo sea adecuadamente reciclado. Dar una segunda vida a nuestros residuos es clave para dar una segunda oportunidad a nuestro planeta.

Quinto contenedor

Para una mayor separación de los desechos, Grhusa ha implementado en diferentes ubicaciones de las comarcas el denominado quinto contenedor, el contenedor marrón destinado para la materia orgánica, junto a la implantación de soluciones para el compostaje doméstico y comunitario. Este container se continuará implementando en el resto del territorio.

Además, la empresa cuenta con el servicio a los ciudadanos del punto limpio, en el que llevar muebles, aparatos electrodomésticos, bombillas, metales o plásticos específicos, por ejemplo. A este se une la recogida de enseres más voluminosos que los vecinos pueden dejar en el contenedor más próximo a su domicilio con previo aviso para su retirada.

La actuación de Grhusa está marcada por una gestión que apuesta por las nuevas tecnologías, poniendo el foco en las personas y sus trabajadores y que dirige la hoja de ruta del futuro de la compañía, con el propósito de seguir aportando soluciones a la ciudadanía y generando valor en su entorno más próximo.

Valores

Con la transparencia de gestión, la valoración de la prestación de los servicios esenciales desde el sector público, el trabajo en equipo, el apoyo a la inserción social de las personas vulnerables, la promoción de la igualdad y el respeto a los derechos laborales como bandera, Grhusa cree firmemente en la innovación, en apoyar y apostar por nuevas tecnologías que favorezcan la creación y desarrollo de entornos laborales seguros, saludables y sostenibles. «Y por supuesto nuestro motor es la búsqueda de la excelencia en el servicio a la ciudadanía y a las administraciones diseñando procesos y procedimientos eficientes, seguros y sostenibles», declaran desde la empresa.

Un motor en cuyo engranaje es clave la ayuda de los ciudadanos, su conciencia acerca de la importancia de separar los materiales y deshechos desde el origen, para lo que es esencial el conocimiento de las funciones de cada contenedor y la unión final a la misma causa: pensar en ‘verde’ para mantener la riqueza del paisaje pirenaico.