Parece que los fondos europeos ya están aquí. Fueron durante meses un canto de sirena para incentivar un cambio en la mentalidad de las inversiones en el territorio. Con 30 millones de euros, el turismo aragonés será uno de los primeros agraciados en percibir algunas subvenciones para cimentar su futuro. Sin embargo, en su idiosincrasia multidisciplinar, podrían funcionar incluso como pegamento en el seno del cuatripartito para sellar las grietas abiertas por una vieja idea, la unión de estaciones de esquí sobre la que parecía difícil alcanzar un acuerdo.

Serán cinco proyectos, en concreto, los tocados por la varita de Bruselas, negociados entre la Consejería de Industria, Competitividad y Desarrollo empresarial del Gobierno de Aragón que dirige Arturo Aliaga y el Ministerio de Industria. En la comunidad se quedarán 30 millones de euros de los 705 repartidos por todo el país. De ellos, el 87% se destinará al sector de la nieve. Se impulsarán, en gran medida, la unión de las estaciones de esquí con inversiones en Candanchú y Astún, Benasque, Cerler y Castanesa.

El ala izquierdista del cuatripartito que conforman Podemos y CHA nunca se ha manifestado a favor de la unión, debido al retroceso de las nevadas en el Pirineo y a que debería acometerse una obra faraónica. Así lo defendieron en el debate sobre el estado de la comunidad, en defensa del Aragón verde, uno de los nexos que cimentan la «estabilidad» en el Ejecutivo autonómico.

Pero la imagen que da Europa mezcla las dos visiones. Las ayudas llegan a beneficio de un futuro sostenible mientras Andorra o Los Alpes cuentan con un modelo de unión de sus dominios esquiables. Además, el territorio también presiona, pidiendo una solución a largo plazo para la nieve aragonesa –el plan estratégico del que todos hablan– y no parches para salvar año a año la temporada.

Fuera del esquí, las comarcas del Matarraña y Daroca obtienen cerca de dos millones cada una para potenciar sus atractivos turísticos y adecuarlos a la sostenibilidad. Por el mismo importe había presentado un proyecto el Ayuntamiento de Zaragoza (2,66 millones, concretamente) para llevar a cabo 18 proyectos diferentes, entre ellos el nuevo centro de visitantes de la plaza del Pilar y la capitalidad de la gastronomía sostenible. La vicealcaldesa, Sara Fernández (Ciudadanos), denunció que los fondos se habían repartido «conforme a criterios políticos y no realmente técnicos», dado que los cinco proyectos aprobados han recalado en ayuntamientos y comarcas que están gestionados por el PAR y el PSOE.

Desde el Departamento de Industria del Gobierno de Aragón señalan que hubo más de una veintena de proyectos presentados, muchos de los cuales no cumplían con los requisitos verdes del plan diseñado por el ministerio e incluso fueron tirados en la primera ronda de evaluaciones. 

La primera piedra para unir las estaciones de esquí aragonesas

La unión de estaciones comienza con los fondos europeos. La primera fase se llevará a cabo para conectar Candanchú y Astún, las dos instalaciones de capital privado, y contará con una partida de ocho millones de euros para iniciar las obras. Además, se buscará «desestacionalizar» la demanda ofreciendo alternativas con nuevos productos turísticos que «contribuyan a fijar población en los municipios del valle del Aragón».

Los trabajos se desarrollarán durante los próximos tres años para ofrecer un producto nuevo que busca proporcionar un mayor dominio esquiable sin fragmentación, uniendo las estaciones y facilitando además el acceso por una nueva entrada a las pistas por Canfranc a través de un aparcamiento anexo a la estación de Canfranc.

Desde el Departamento de Industria, que abarca el área de Turismo, indican que «la unión de las estaciones está pensada para configurar un producto nuevo más competitivo internacionalmente». No esconden que la sostenibilidad y una limpieza de cara a las instalaciones otorgaría puntos al proyecto pirenaico de albergar los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030.

Especifican desde Industria que la «revitalización» de la vieja idea de la unión de estaciones «permite ya el mantenimiento de la estación de Candanchú y todos los puestos de trabajo, así como los establecimientos del valle dependientes en parte de esa actividad». Además, según defiende el proyecto aceptado por Europa, se crearían nuevos puestos de trabajo vinculados a las actuaciones, a los que se sumarían los generados con nuevos productos adicionales que resulten del proyecto, aunque todavía no se especifican cuáles.

Cabe recordar que Candanchú a punto estuvo de no abrir sus instalaciones para la presente temporada. Fue después de un tira y afloja con el Gobierno de Aragón cuando se aprobó una línea de financiación de cuatro millones de euros (dos para Candanchú, dos para Astún) tras el que se llegó al acuerdo. Una de las condiciones para que hubiera fumata blanca radicó en que el crédito no fuera un parche, sino una primera piedra para garantizar el futuro de la nieve en el valle del Aragón.

Esta primera piedra estará compuesta del Plan de Sostenibilidad Turística que forma parte de los fondos de la Unión Europea. «Como marca Europa, se llevará a cabo cumpliendo los requisitos medioambientales y sostenibles», aseguran desde Industria. 

Estaciones de esquí. EL PERIÓDICO

Dos kilómetros hasta Cerler en telecabina

Con más de 10 millones de euros contará el Ayuntamiento de Benasque para financiar la construcción de un telecabina que una la localidad ribagorzana con la estación de esquí de Cerler. Será un transporte monocable multiaventura, que contará con dos kilómetros de recorrido, salvaría un desnivel de 370 metros y podría tener capacidad para transportar a 2.400 personas cada hora. El objetivo, según figura en el proyecto, se basa en crear un «circuito de interés turístico» que desestacionalice la demanda, acorde a la línea en la que se mueve el resto de inversiones en la nieve aragonesa del Plan de Sostenibilidad turística.

En Benasque, el proyecto busca un desarrollo sostenible del turismo a través de una diversificación de la oferta turística, la llegada de visitantes y reducir el impacto medioambiental a través de una obra del siglo XXI, un telecabina monocable multiaventura en el Valle de Benasque, de manera que esté conectada con Cerler y así formar un circuito de interés turístico.

Señalan desde el área de Turismo del Gobierno de Aragón que esta zona montañosa del centro del Pirineo está «especialmente afectada por el turismo, fomentado casi en exclusiva por la presencia de pistas de esquí y atracciones de deportes de invierno», por lo que su entorno ganaría con la construcción de esta «singular» instalación. A modo de comparación, se subraya la existencia de equipamientos similares en otras zonas montañosas de Europa. Además, explican desde el departamento del ramo, se intenta «diversificar la oferta turística para contribuir a generar oportunidades de empleo y actividad y favorecer la cohesión territorial aumentando la competitividad del territorio».

Esta iniciativa ya llevaba coleando algo más de una década. En el año 2009, la Dirección General de Medio Ambiente le dio el visto bueno a un proyecto de un telecabina tricable que ya se había planeado en 2006. Serviría, según manifestó el alcalde de Benasque en multitud de ocasiones, para descongestionar el tráfico rodado entre la localidad ribagorzana y la estación de esquí, que habitúa a sufrir colapsos cuando la carretera se hiela o nieva en las temporadas invernales. Por aquí se justificaría el beneficio medioambiental, pues retiraría en torno a 2.300 vehículos del tráfico en un sábado de temporada, según las últimas estimaciones calculadas. 

Estación de esquí de Cerler. ANGEL DE CASTRO

Una carretera conectará Castanesa y Cerler

Otros ocho millones de euros irán a parar a la nieve aragonesa, en este caso al entorno del valle de Castanesa. Con esta partida se construirá un acceso viario entre Montanuy y el valle de Castanesa, donde se ubica la ampliación de la estación de Cerler que ha echado andar en la presente temporada. La carretera conectará el valle de Castanesa con el área de influencia de Cerler y será la primera vía que unirá estos dos puntos en lo que califican desde la DGA como una actuación «vertebradora».

Servirá, según el Departamento de Industria del Gobierno de Aragón, para recibir turistas «amantes del ámbito natural y rural, propiciando experiencias y también nuevos itinerarios no motorizados, generando nuevos productos turísticos en toda época del año, apostando por una puesta en valor del entorno rural del valle, su potencialidad turística ligada al medio natural y sus productos locales». El coste estimado de este proyecto de mejora de los accesos viarios ronda los nueve millones de euros y ya fue solicitada por el consistorio.

El proyecto ha salido adelante por acoplarse a los objetivos fundamentales de la Estrategia de Sostenibilidad Turística en Destinos, defienden desde el área de Industria. Esto es, por tratar de llevar a cabo un desarrollo equilibrado del potencial turístico en el conjunto del territorio, al tiempo que pretende consolidar «vínculos de solidaridad» en el interior de las comunidades, de manera que contribuya a la solución de problemáticas comunes de las dimensiones ambiental, socioeconómica y territorial de la sostenibilidad, promoviendo un reparto racional de las cargas sobre el territorio y consolidando una gestión territorial integral que ayude a frenar los procesos de despoblación en la comunidad aragonesa. 

Ayuntamiento y escuela de Monanuy. ANGEL DE CASTRO

La rehabilitación del castillo de Daroca

Daroca recibirá dos millones de euros procedentes de los fondos europeos para iniciar la rehabilitación del castillo y las murallas. El conjunto arquitectónico cuenta con una extensión cercana a los cuatro kilómetros, lo que da una muestra de que esta partida supondrá un comienzo para las labores de conservación. Fuentes municipales indican que podría ser necesaria una inyección de 12 millones de euros para llevar a cabo la ejecución completa.

En cualquiera de los casos, será esta la cuestión prioritaria del proyecto que se desarrollará entre 2022 y 2024, aunque no la única. Se procederá a la renovación del alumbrado para lograr una mayor eficiencia energética, a la adecuación de caminos y senderos que permitan acceder y visitar tanto el castillo como las murallas y el resto de monumentos, así como la decoración de fachadas dentro del proyecto Muralea, que permite resaltar el valor las tres culturas presentes en la historia darocense y la restauración ambiental del entorno.

Daroca ha logrado la inyección de los fondos de la UE al demostrar que su proyecto permitirá «una mejora de la proyección local», con una apuesta por el turismo como impulsor del desarrollo económico local, buscando una rentabilidad para los empresarios existentes y fomentar la creación de empleo a través de la dotación de equipamientos de uso turístico que generen sinergias en el territorio, según explican desde el Departamento de Industria. Además, se pretende dotar de más herramientas a los empresarios y personas en desempleo como forma de tecnificar la oferta existente a través de formación especializada y sobre todo a través de la implicación de todos los actores del sistema en la necesidad de promocionar y proteger los recursos disponibles que permitan conservar los espacios.

En definitiva, la mezcla de los estilos mudéjar, gótico y renacentista, conjugado con la riqueza del entorno rural, la gastronomía y las costumbres y tradiciones le han valido a Daroca una ayuda por valor de dos millones de euros. 

El castillo de Daroca será rehabilitado. EL PERIÓDICO

Rutas de aventura y para ciclistas por el Matarraña

La comarca del Matarraña se ha llevado el último trozo del pastel –también el más pequeño– de los fondos europeos para turismo sostenible en Aragón. Se ha hecho fuerza en que se conozca a este entorno como la Toscana española y algo ha debido de calar en el imaginario colectivo. Con un fondo de 1,7 millones de euros se potenciará el turismo deportivo y de aventura con la creación de la Vía Verde Val de Zafán, además de otras rutas de BTT, ecuestres, de senderismo y actividades deportivas de riesgo.

Por otro lado, se dará prioridad a la promoción y comercialización online para acceder directamente a los demandantes potenciales de este tipo de turismo, rural, poco masificado y de interior. La partida se destinará asimismo a mejorar la comunicación a través del aumento de la información disponible del destino y el proceso de entablar una relación directa con el cliente final. Desde el área de Turismo de la DGA defienden que la creación de este producto turístico debe incentivarse al existir «muchas oportunidades para crearlos aprovechando diferentes recursos como los relacionados con el turismo activo-deportivo, de naturaleza, los productos agroalimentarios o el turismo cultural».

Además, en el proyecto presentado se incide en que los valores de la comarca están «al alza» en el terreno turístico, al tiempo que se insta a mantener como protagonistas y principales atractivos los recursos agroalimentarios y artesanales del entorno del Matarraña. También se hace referencia a la diversidad de los paisajes.

Otra parte de los fondos que llegarán al Matarraña se utilizarán para formar a los agentes implicados en la consecución de estos objetivos, aunque no se especifica en base a qué actuaciones o medidas. 

El puente de Valderrobres. ANGEL DE CASTRO