Era cuestión de tiempo comprobar si alguien del PSOE en Aragón se salía de la senda de cerrar filas con el ministro Alberto Garzón o, como se temía, alguien votaba a favor o como mínimo facilitaba que se reprobara públicamente y se pidiera la dimisión del ministro de Consumo, Alberto Garzón por sus afirmaciones en una entrevista en The Guardian sobre los productos cárnicos que exporta España de las macrogranjas, que se ha interpretado como un ataque a la ganadería en general, también a la extensiva que él defiende. En la comunidad, desde este viernes, se puede decir que a la segunda fue la vencida: el PSOE altoaragonés del presidente provincial Miguel Gracia se abstuvo en una de las dos mociones presentadas en el pleno de la Diputación de Huesca, la del PAR, y pese a tener mayoría absoluta en el debate facilitó que saliera aprobada la petición de dimisión que esta incluía. La otra, la del PP, la votó en contra por atacar también al Gobierno de España en su conjunto. Y otras dos, una de Cs y otra del propio PSOE, pedía «reprobar» al ministro. No obstante, el lío ya estaba montado en Madrid, hasta donde llega la onda expansiva.
La decisión del PSOE altoaragonés no ha hecho sino contribuir a las tensiones ya existentes en el Comité Federal del PSOE por esta cuestión y, a su vez, con el socio de la coalición en el Gobierno central, Unidas Podemos, que sigue atentamente cada pronunciamiento de los socialistas en esta remesa de mociones que, sobre todo por parte del PP, se han presentado en ayuntamientos, diputaciones y comunidades autónomas de toda España. Y sus reacciones no se han hecho esperar. El líder de IU en Aragón lamentaba este viernes que algunos sectores de la "cúpula socialista aragonesa" se conviertan en "el primer enemigo" de la coalición con Unidas Podemos en Madrid. Y este sábado se sumaba la secretaria general de Podemos en la comunidad (y consejera en el Gobierno cuatripartito de la DGA liderado por Javier Lambán), Maru Díaz, que arremetía contra la "deslealtad" del PSOE y su "peligrosa" decisión de hacer seguidismo de la "política de bulos" que ha emprendido la derecha en España.
En el caso de Aragón, además, se da la circunstancia de que sus compañeros en la Diputación de Zaragoza (DPZ) sí cerraron filas con el ministro y Unidas Podemos para no darle más cancha a las críticas del PP y la derecha en bloque. Los socialistas que dirige Juan Antonio Sánchez Quero rechazaron la moción esta misma semana y la institución no pidió públicamente la dimisión que sí reclamó ayer el pleno de la DPH.
Para su debate en el pleno de ayer se habían presentado un total de cuatro mociones relacionadas con la ganadería. La del propio PSOE incluía ya la petición de «reprobar las palabras del ministro de Consumo, Alberto Garzón», mientras que Cs, cuya proposición también salió adelante con los votos de los socialistas, pedía directamente la reprobación del mandatario de IU.
Pero era la del PAR, socio del PSOE en el Gobierno de Aragón, la que daba un paso más y pedía directamente «reclamar la dimisión del mencionado ministro». Esta fue en la que los socialistas se abstuvieron, permitiendo que saliera adelante con los votos del resto de grupos: siete del PP, tres del PAR y uno de Cs.
A pesar de haber permitido que la petición de dimisión saliera adelante, fuentes próximas al líder de los socialistas oscenses insistieron en que ellos no apoyaron explícitamente el cese del ministro Garzón y que se trató de una concesión a sus socios del PAR que, por el contrario, no toleraron al PP.
Deslealtad
Sin embargo, las primeras reacciones en Unidas Podemos fueron contundentes. En este caso, en declaraciones a este diario, por parte del coordinador general de IU en Aragón, Álvaro Sanz, que arremetió con dureza contra el PSOE: «Tras más de 10 días desde que el lobi cárnico y las derechas y extremas derechas lanzasen este bulo, el PSOE ha tenido tiempo más que suficiente para dejar de darle cuerda al embuste. La deslealtad del PSOE en la DPH es lamentable», replicó el también diputado en las Cortes de Aragón, que en febrero podría reeditar este mismo debate.
«IU ha evitado entrar en el juego de la derecha siempre en este tipo de barros, muy lejos de la actitud que han demostrado los socialistas hoy en Huesca. Al final va a resultar que los primeros enemigos del gobierno de coalición van a estar en determinados sectores de la cúpula socialista aragonesa», añadió.
En términos muy duros se ha expresado también Maru Díaz, secretaria general de Podemos Aragón. "La deslealtad del PSOE permitiendo que se pida la dimisión de un ministro del Gobierno de coalición nos indigna y a quien más daño hace daño es a Pedro Sánchez, al que flaco favor le hacen. Esto supone una deslealtad hacia un socio de gobierno, además es un hecho muy peligroso, pues supone hacer política en torno a bulos".
En este sentido, Díaz señala que el PSOE debería "poner fin al ruido y blindar el Gobierno de coalición" ante los ataques recibidos de los partidos de la derecha, que "ha demostrado que la ganadería no le importa nada y que sólo la utiliza como arma arrojadiza contra el Gobierno".
