La forma de moverse por las ciudades cambia y los medios de transporte han de adaptarse a las nuevas necesidades de los usuarios, que cada vez más buscan formas de desplazarse más respetuosas con el medioambiente.
En el caso de Avanza, la empresa que gestiona el servicio de autobuses urbanos de Zaragoza, este compromiso con la movilidad sostenible tiene su principal exponente en el proyecto de electromovilidad, impulsado junto al Ayuntamiento de Zaragoza, que pasa por sustituir progresivamente todos los vehículos de la flota urbana por otros impulsados con tecnologías limpias.
Reemplazar cada autobús diésel por otro eléctrico supone un ahorro de 1.700 toneladas de CO2 emitidas a lo largo de su vida útil. A ello se suma la reducción de la contaminación acústica, especialmente en las áreas de influencia de las líneas en las que prestan servicio. En la actualidad el 31,5% de la flota está compuesta por vehículos con tecnologías sostenibles, en concreto 111 híbridos y 4 ‘cero emisiones’ a los que se unirán este año 68 autobuses eléctricos de última generación.
Conducción eficiente
Además de la electrificación de la flota, otro proyecto en el que está trabajando Avanza orientado a reducir la huella de carbono es la conducción eficiente. Basado en el análisis de datos de manera objetiva, persigue la optimización del consumo de combustible, la mejora del confort del viajero y la reducción de la siniestralidad.
Reemplazar cada autobús diésel por otro eléctrico supone un ahorro de 1.700 toneladas de CO2
Actualmente la red de autobuses urbanos de Zaragoza consta de 43 líneas y se realizan 7.400 expediciones diarias, con una frecuencia media de paso de 8 minutos. El servicio cuenta con un índice de fiabilidad superior al 99%, y de puntualidad cercano al 95%.
Sostenible y seguro
También ha sido pionero en implementar medidas que garanticen la protección y seguridad de los usuarios durante la pandemia de coronavirus.
Avanza fue la primera empresa de transporte público en España que obtuvo el certificado Aenor de buenas prácticas contra el covid-19. En este sentido, la última novedad es la aplicación, en todas las superficies interiores de los autobuses, de un producto innovador (Nanoflex® Finish MR) que proporciona protección eficaz y permanente contra el riesgo de contagios por contacto superficial.
Este tratamiento de las superficies se une a otras medidas existentes, como la ventilación constante, con la indicación de mantener siempre abiertas todas las ventanillas de los autobuses.
Gestión excelente
Como empresa responsable y comprometida con la protección del medioambiente, Avanza en Zaragoza cuenta con un Sistema Integrado de Gestión, implantado en base a las normas ISO 9001 de Gestión de la Calidad, ISO 14001 de Gestión Ambiental, ISO 50001 de Gestión de la Energía, UNE 166002 de Gestión de la I+D+i y UNE 13816 de calidad del servicio del transporte público de pasajeros. Este sistema está certificado de acuerdo a los requisitos de dichas normas, y es auditado periódicamente por Aenor.
La apuesta de Avanza por la excelencia empresarial ha sido reconocida recientemente por el Instituto Aragonés de Fomento (IAF) con el sello Aragón Empresa en categoría plata por su alto nivel de compromiso con la excelencia. Este reconocimiento llega tras haber sido auditada por expertos independientes que han podido evaluar las actividades y procesos que desarrolla la compañía, un proceso que le ha llevado a obtener una puntuación superior a 400 puntos en el Modelo EFQM.
Alta satisfacción de los usuarios
Por otra parte, el Índice de Satisfacción del Cliente (ISC) del servicio de bus urbano de Zaragoza, operado por Avanza, ha obtenido en 2021 una nota de 7,80 sobre 10, el dato más alto desde que se iniciara la concesión en 2013. Esta cifra supone un incremento de un punto con respecto a la nota obtenida en la primera encuesta (6,80) hace ahora ocho años y mejora sustancialmente la obtenida en 2019 (7,56), la última realizada. Esta puntuación de los usuarios confirma la tendencia anual de mejora del servicio y reconoce el esfuerzo realizado en un año marcado por la pandemia.
Estos datos se han obtenido de la medición anual de la calidad percibida, a través de la realización de encuestas a casi 11.800 usuarios de toda la red de autobús, entre los meses de octubre y noviembre pasados. Por líneas, la mejor valorada de todas es la 39 (Pinares de Venecia - Vadorrey), que obtiene una nota superior a 9. Además, otras ocho líneas (23, 36, 38, 43, 55, 57, 58, y C1) están valoradas con más de un 8, y el resto de líneas de la red recibe puntuaciones por encima de 7, mejorando la valoración de años anteriores. Los tres aspectos mejor valorados son también los más importantes para los usuarios: el impacto medioambiental (7,83), la seguridad y la accesibilidad (7,81).
Mejora de los servicios
El objetivo de la medición anual de la calidad percibida es conocer la valoración del servicio recibido por parte de los usuarios de los autobuses urbanos de Zaragoza, así como identificar los elementos de valor para el usuario y su importancia relativa. De esta manera, en función de la calidad percibida y las expectativas detectadas, se puede definir un plan de mejora de la calidad del servicio.
El impacto ambiental, la accesibilidad y la seguridad son los aspectos mejor valorados
En cuanto a la metodología utilizada, el análisis de la calidad percibida por el usuario de la red de autobuses urbanos de Zaragoza se mide con una amplia encuesta que se realiza a bordo de los autobuses de las diferentes líneas y en las paradas principales de cada línea.
Del total de personas consultadas en 2021, 7.362 fueron mujeres y 3.028, hombres. Por edades, el 44% se situó en la franja entre 36 y 60 años, el 36% tenía entre 16 y 35 años, y el 20% restante más de 61 años.
