Dos de los baluartes en logística y transporte en Aragón, como son los aeropuertos de Zaragoza y de Teruel, están siendo testigos de fuertes inversiones para atender la demanda y previsiones de crecimiento. El primero será renovado y la segunda instalación será ampliada. 

El plan de actuaciones aprobado por Aena para el periodo 2022-2026 en el aeropuerto de Zaragoza prevé que las obras de renovación integral de la pista de aterrizaje puedan iniciarse en el segundo semestre de 2023. El objetivo es poder disponer de la nueva pista ya renovada a finales de 2024.

Todo dependerá de lo que diga el proyecto que están elaborando los técnicos y que se espera que vea la luz a lo largo de este año para poder sacar los trabajos a licitación a finales de este año. La inversión sería de entre 13 y 15 millones de euros. Esto supondrá gran parte de los 19,84 millones que el plan de Aena va a dedicar al aeropuerto y el impulso a una de las actuaciones más ambiciosas de los próximos cinco años.

La finalidad es conseguir una «nueva pista de altas prestaciones», señaló el director del aeropuerto de Zaragoza, Marcos Díaz, a este diario, a la medida de los aviones «de máxima categoría» que operan en la capital aragonesa. Los de categoría E para aeronaves de hasta 80 metros de longitud, los cargueros de las rutas más largas con destino a lugares como China, Corea o Estados Unidos, que necesitan más pista que los tres kilómetros que tiene la segunda pista, la ubicada en la zona más próxima a la Base Aérea. La pista, que seguirá teniendo 3,7 kilómetros, se someterá a unos trabajos que «se concentrarán entre otoño y la primavera de 2024». Respecto a las inversiones futuras, al margen de la remodelación de la pista de aterrizaje de 3,7 kilómetros, destaca la nueva zona a urbanizar para carga, unos 64.000 metros cuadrados más que dotar de servicios básicos de luz, agua, saneamiento, redes y viales de acceso.

El aeropuerto de Zaragoza se mantiene como el segundo en volumen de mercancías transportadas de la red de Aena en España. Al cierre de 2021, la terminal aragonesa puso un nuevo listón en 194.351 toneladas, 50.000 más que hace solo un año (un crecimiento del 35,6%) y 12.000 más que en 2019, un 6,4% más que cuando el covid no causaba estragos aún. 

Así, el aeropuerto continúa su progresión ascendente de hace ya muchos años, un despegue que supuso, por ejemplo, cerrar un ejercicio 2021 con más del doble de kilos que se movían en esa misma pista hace solo seis años. Las 85.741 toneladas de 2015 se han multiplicado por dos y las 48.647 de hace diez años por cuatro. Así, 2021 ha sido el año de la consolidación de una tendencia, la segunda plaza nacional del tráfico aéreo de mercancías, que se venía produciendo en los dos años anteriores de forma esporádica y hoy ya es una constante. 

El aeropuerto de Teruel se está acondicionando para el estacionamiento de un gran número de aeronaves. Aeropuerto Teruel Vista aerea

Ampliación de Teruel

Por su parte, el aeropuerto de Teruel también atenderá la demanda de espacio para alcanzar en los próximos meses las 400 plazas de estacionamiento de aeronaves. Será tras la ejecución del Proyecto de Interés General de Aragón (PIGA), que el consorcio formado por el Gobierno de Aragón y el ayuntamiento de la localidad está tramitando y que actualmente se encuentra en proceso de redacción para llevar a cabo una ampliación de 195 hectáreas este año.

Hasta que eso suceda, ya han finalizado las obras de ampliación de aparcamiento en las zonas sur e industrial, que han permitido dotar a las instalaciones aeroportuarias de 50 plazas para aeronaves de grandes dimensiones, que se suman a las 130 plazas que tenía de capacidad. Los trabajos han tenido un coste de 1,8 millones en 370.000 m² de superficie.

También se ha ejecutado la pavimentación de la campa de estacionamiento dentro de la fase IV que es la última zona de terreno existente que quedaba por acondicionar. En esta zona, además, se ha instalado un mirador, que servirá de control y para dar una nueva perspectiva del aeropuerto de Teruel. Las obras tienen un presupuesto de 2,6 millones de euros y finalizarán a lo largo de 2022.

El aeropuerto de Zaragoza transportó en 2021 más de 194.000 toneladas, lo que le aupó a una segunda posición en el ránking nacional de Aena solo por detrás de Madrid-Barajas y le llevó a estar entre los 20 primeros de Europa. Concretamente en el puesto 17 y con un crecimiento del 35% respecto al año anterior, que fue el tercero más alto del continente a nivel porcentual.

Los expertos destacan la «potencialidad» de la terminal, «como para aumentar mucho más». Así lo aseguró Ángel Gil, gerente del Clúster Logístico de Aragón y miembro de la Comisión de Transporte y Logística del Colegio de Ingenieros Industriales de Aragón y La Rioja, quien explicó que «el volumen de ocupación es del 49%» en los vuelos de importación y del 61% en los de exportación». Esto «permite un amplio crecimiento sin nuevas líneas».

Zaragoza es un «destino superatractivo», asegura, por su rapidez en la operativa para los aviones, tener dos pistas y una con longitud suficiente para los cargueros más grandes, y porque sus tasas son, por ejemplo, «un 40% más baratas que las de Madrid». Por eso se ha colado entre los 17 mejores de Europa, dice, y está «entre los cinco mejores aeropuertos logísticos», que utilizan cargueros puros y no las bodegas de los aviones de pasajeros.