Teruel registrará este fin de semana, con motivo de la celebración de las Bodas de Isabel, una ocupación hotelera del 85%, lejos del cien por cien que se alcanzó en febrero de 2020, cuanto tuvo lugar la última representación antes de la irrupción del coronavirus, que impidió o limitó posteriores recreaciones de la historia de los Amantes. Hoy, de momento, se están montando las jaimas y los distintos puntos de venta, en preparación para el desarrollo del legendario acontecimiento medieval.

«Este año, por distintos motivos, la afluencia va a ser algo menor», reconoció Isabel Esteban, de Teruel Empresarios Turísticos (TET), que subrayó que, no obstante, los organizadores están «contentos» de la repercusión obtenida tras el obligado parón de la edición de 2021.

Según Esteban, tanto el tiempo, que se anuncia algo lluvioso, como la situación económica general, que ha generado incertidumbre, han influido en el hecho de que no se haya llegado al lleno total.

Menor afluencia en los alrededores

El descenso de la ocupación se ha dejado notar también en los alrededores de la capital turolense, dado que, en años anteriores, numerosos visitantes debían alojarse en pequeñas localidades situadas en un radio de 50 kilómetros en torno a la ciudad del_Torico.

Con todo, el balance es positivo, en palabras de Isabel Esteban. «El mero hecho de que se celebre este año ya es una garantía de continuidad para la recreación histórica, porque realmente solo se interrumpió en los meses más duros del confinamiento», explicó.

Una nueva escena que surgió el año pasado en la edición virtual sobre el hechizo embaucó a Isabel de Segura, y le hizo olvidar su promesa de esperar durante cinco años a Diego de Marcilla, será el punto de partida de la representación teatral este jueves, a las 21 horas, en la plaza de la Catedral, que continuará el viernes desde las 10 horas con la apertura de los campamentos y mercado medieval, ambientado con música de Charrarie y Os Fillos Do Sobrarbe.

Además, pese a que parece ser que no habrá tantos espectadores, lo cierto es que los alojamientos de turismo rural de la provincia de Teruel, en particular los más próximos a la capital, han registrado cierta demanda.

«Van a venir, sobre todo, muchos de los trabajadores que intervienen en las distintas facetas de las recreaciones», señalo Jesús Marco, responsable de Faratur, entidad que agrupa a la oferta de turismo rural de la provincia.

«Esas personas, al igual que un número considerable de visitantes, prefieren descansar por la noche en lugares donde no haya aglomeraciones», explicó Marco. «No faltan las personas que se buscan habitaciones en la sierra de Albarracín e incluso en la zona de Gúdar-Javalambre, en lugares como Mora de Rubielos y Rubielos de Mora, entre otros», precisó el responsable de Faratur.

En su opinión, el descenso en la afluencia se puede deber a las predicciones meteorológicas, que apuntan a que hará un tiempo frío e inestable, con nevadas incluso en las sierras del Maestrazgo.

Las fiestas en Castellón restan afluencia

Además, comentó Marco, este año, las Bodas de Isabel coinciden con la celebración de las fiestas de la Magdalena en la ciudad de Castellón de la Plana, «lo que sin duda hará que vengan menos visitantes, pues una parte importante de la clientela procede de esa parte de la Comunidad Valenciana», indicó.

El miembro de Faratur destacó que, incluso durante el coronavirus, la ciudad de Teruel ha seguido celebrando, sin público, actos relacionados con la leyenda de los Amantes, lo que ha servido para que los intérpretes no perdieran contacto con la tradición y la mantuvieran viva a la espera de que las condiciones sanitarias permitieran celebrarla con seguridad.

Marco indicó que, sin duda, este año no hay tantas reservas en los alrededores de Teruel, pero ha manifestado que desconoce en qué medida ha bajado la afluencia. Un dato que, por otro lado, quedará enmascarado por el hecho de que numerosas familias van y vienen en el día a la recreación de las Bodas de Isabel.

Previsión de lluvia

 Con la mirada puesta en la previsión de lluvia y el ruido de fondo del claxon de los camiones, el mercado ambulante de la ciudad de Teruel se mezclaba este jueves con el montaje de las jaimas y los puestos del mercado medieval, que auguran el regreso de la presencialidad a la decimosexta edición de las Bodas de Isabel de Segura, del 24 al 27 de septiembre, informa Efe.

Unos doscientos puestos de venta, siete tabernas y cuatro teterías forman parte del mercado medieval, que durante todo este jueves se irá montando en la capital turolense, junto a talleres de cetrería, medicina tradicional, juegos de niños y actividades artesanales, para devolver a las calles del Centro Histórico al siglo XIII y revivir la leyenda de los Amantes de Teruel.

Teníamos muchas ganas de volver a este mercado medieval. Es una feria muy grande y viene mucha gente, por lo que esperamos que el tiempo se comporte y no llueva durante el fin de semana”, explicaba Lidia Gabanilla, propietaria de un puesto de quesos artesanales que llegaba a la capital turolense desde Moyá, en la Barcelona.

Gabanilla era de las pocas que ya tenía el puesto completamente montado y todos los productos expuestos, con queso de cabra, queso de búfala, queso curado o queso de oveja, mientras que otros comerciantes, como el zaragozano Alejandro Martínez, se apresuraban en descargar cajas y colocar las lámparas y piezas artesanas bajo el toldo ante la fina lluvia que no dejaba de caer.

El momento de la boda

Martínez recordaba que es el sexto año que viene a las Bodas de Isabel de Segura, por su tamaño y calidad, y reconocía que la pandemia les había pasado factura, pero que ahora hay “mucho más” movimiento en los mercados y ferias y que “la gente está perdiendo el miedo” a salir a la calle y divertirse.

Apenas unos metros más adelante, en la plaza de la Catedral, Carmen y Nadia ultimaban el montaje de una barra en el bar de la Abadía para dar respuesta al aumento de clientela que esperan durante este fin de semana, motivo por el que además explicaban que habían duplicado su plantilla, pasando de dos a cuatro trabajadores: “Esperamos que no llueva, porque sino no valdrá la pena”, reconocían.

A las 12.15 horas de mañana tendrá lugar la Boda de Isabel de Segura con Don Pedro de Azagra en la plaza de la Catedral, uno de los actos más populares de la recreación, y seguirá con el pregón oficial a cargo de la Encomienda Templaria y Hospitalaria de Teruel, en el Balcón del Ayuntamiento, a las 13 horas, y la entrega del Premio Tirwal de Honor, a las 13.30 horas, en la iglesia de San Pedro.

El jueves 24 de marzo se ha suprimido el estacionamiento en el Centro Histórico, ronda Dámaso Torán, ronda Ambeles, calle José Torán, entorno de la plaza de Toros de Teruel y calle Magisterio, aunque se permite el tráfico para llevar a cabo el montaje de puestos y jaimas, mientras que el viernes la carga y descarga se trasladará a la plaza Domingo Gascón, y las calles Joaquín Arnau y Comandante Fortea, en horario de 6 a 10:30 horas