El ajetreo de clientes en el Mercado Central de Zaragoza era el habitual esta mañana para un jueves a mediodía. Los vecinos de Zaragoza volvían a hacer cola frente a unos puestos que lucían mostradores mucho más llenos de género que los que se vieron hace tan solo una semana, cuando los detallistas vivían el punto álgido de la crisis de los transportes que en el caso de las pescaderías se unía a los paros convocados por pescaderos y mariscadores en distintos puntos de la costa.

Carlos Barrera, responsable de la Pescadería PabloMar, una de las más frecuentada en el mercado central, ha asegurado que esta semana los problemas solo se han registrado en los peces pequeños de bajura del mediterráneo. «Salmonetes, anchoas, boquerones... eso ha sido lo que no hemos tenido esta semana, del resto hemos podido comprar de todo», ha explicado Barrera.

En el caso de Pedro Huerta, el pescadero al frente de Pescados y Mariscos Pedro el sentimiento es similar. «Ya el lunes llegaron camiones escoltados para que pudieran traer el género y el resto de la semana hemos podido comprar de todo prácticamente con normalidad», ha apuntado Huerta.

En cuanto a los precios, la situación también se ha normalizado con bajadas hasta volver a alcanzar los precios de antes del punto álgido de la crisis de los transportes. «Todo vuelve a estar más bajo que hace una semana e incluso hay cosas como el bonito que están incluso tres o cuatro euros más baratas que hace dos semanas», ha explicado Barrera.

Al hablar de subidas, tan solo la merluza y el bacalao estaban ayer más caras que habitualmente. «Un 10% más», según Huerta.

La noche del miércoles se llegó a un acuerdo entre Gobierno y las cofradías de pescadores que todavía permanecían paradas sin salir a a faenar una cuestión que el jueves por la mañana todavía animaba más a los pescadores. «Si ya hay acuerdo y salen a faenar la semana que viene, raro será que no tengamos de todo y no podamos trabajar con normalidad», ha apuntado Barrera.

Una idea que también compartía su compañero Huerta. «Seguimos pendientes de lo que pase pero seguramente ya no haya problemas y todo funcione con normalidad», aseguró. «La semana pasada todo se auguraba muy negro, pero poco a poco hemos ido viendo mejoría y hemos pasado la semana no muy mal», ha contado Huerta.

Pedro Huerta, gerente de Pescados y Mariscos Pedro, limpiando salmón ayer. | ANDREEA VORNICU

Después de sufrir las consecuencias de la crisis y viendo con perspectiva el consumo que los clientes realizaron la pasada semana, los pescaderos aseguran que el desabasteciemiento, aunque grave, no fue total. «En Zaragoza no ha habido ningún compañero que haya tenido que cerrar de forma completa por falta de género y, aunque estaba caro, la gente siguió comprando», ha comentado Barrera.

Esta mejoría también se ha vivido en los puestos de la fruta y verdura. Ignacio Ornad, al frente del puesto Los Pocholos lucía este jueves un mostrador repleto de todo tipo de frutas y verduras creando un colorido lienzo que llamaba la atención de un gran número de clientes.

Al igual que en el caso de las pescaderías, la verdura ha vuelto a los mostradores a precios mucho más acordes que los que se veían en los carteles durante la pasada semana. «Durante esta semana no hemos notado apenas la falta. Solamente alguna cosa puntual, productos que vienen de Almería o Granada como las judías o alguna variedad de tomate», ha apuntado Ornad.

En estos últimos casos el detallista reconoció que el desabastecimiento no ha sido total y que el poco producto que llegaba hasta Mercazaragoza se paga más caro por su calidad. «Traen muy poco y sí que es verdad que el que viene es el de mejor calidad y es lógico que va a ser más caro», explica Ornad. Un aumento que el detallista cuantifica en un 15% más que antes de la crisis de los transportes.