En los últimos años se ha detectado una disminución de la mortalidad infantil y también por enfermedades del sistema circulatorio, algunos tipos de cáncer (estómago), enfermedades del sistema respiratorio o digestivo, así como accidentes de tráfico, datos positivos que nublan las cifras de 2020, en el que el coronavirus ha provocado un incremento importante de la mortalidad en las edades más avanzadas ese año siendo la principal causa de muerte (lista reducida) tanto en hombres como en mujeres en las tres provincias.
El exceso en el número de fallecidos se comenzó a notar a partir de la semana 11 del año (marzo), que coincidieron con los primeros casos de coronavirus en Aragón. Esa alta incidencia es la que se ha visto que coincide con las diferentes ondas epidémicas que ha sufrido la comunidad, reflejadas en el Sistema de monitorización de la mortalidad diaria. Es ahí donde, a través de un canal se reflejaban semana a semana el número de defunciones y se calculó la variación de los fallecimientos con la media de los de otros años.
La mortalidad registrada sufrió picos importantes, como el de la semana 14 (del 30 de marzo al 5 de abril), que supuso un exceso respecto a los valores del canal de más del 104% o el de la semana 45 (del 2 al 8 de noviembre), con más del 85%. El informe tiene en cuenta la estacionalidad, por lo que por ejemplo, los fallecidos en la semana 32 (primera de agosto) fueron un 28% más con 278 muertos, y se considera exceso de mortalidad, mientras que están dentro de los valores esperados los 277 de la primera semana de 2021.
Debido al exceso de muertes en pandemia, se han seguido recibiendo certificados de defunción correspondientes al 2020 durante la realización del apéndice, por lo que los datos de mortalidad en Aragón son superiores a los datos del INE, donde constan 16.362 defunciones, con más de mil muertes todos los meses (salvo junio, con 980). El mes en el que murieron más aragoneses fue abril de 2020, con casi 800 fallecimientos más que el promedio de entre 2015 y 2019 (de 1.098 a 1.863). Noviembre pasó de una media de 1.117 muertos a 1.741.
Estas cifras suponen que el año 2020 se apreció un exceso de mortalidad del 17,2% (21,8% en el caso de las mujeres y la mitad casi, el 12,7 en el de los hombres) con respecto a esa misma franja; siendo abril, el mes con más exceso (casi el 70%, poco más del 53% en el caso de los hombres pero casi el 87% en el caso de las mujeres). Por edades, el número de fallecimientos de menores de 65 se mantuvo, sin embargo creció en el de mayores, con casi 2.500 fallecidos más.
