Los empresarios de las provincias de Teruel, Cuenca y Soria, unidos en la alianza llamada Red de Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa (Red SSPA), acusan ya el retraso en la llegada de las ayudas estatales de finalidad regional para el periodo 2022-2027 y ya se han dirigido por carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para trasladarle su "preocupación". Estas ventajas fiscales que les corresponden por ser territorios altamente despoblados no están llegando y temen que se eternice el "procedimiento de puesta en marcha" de las mismas.

En el escrito, suscrito por la patronal de las tres provincias, CEOE Teruel, FOES y CEOE Cuenca, recuerdan al Ejecutivo que tras su malestar hay "un trabajo importantísimo" realizado para ser reconocidos por la Comisión Europea como zonas con derecho a beneficiarse de estas ayudas que se conceden en el resto de territorios del continente en iguales circunstancias. Y que ahora que tienen la posibilidad de obtener "ayudas de funcionamiento por un importe equivalente al 20% de los costes laborales", no les están llegando aún.

"Conscientes de la gran trascendencia de este logro, desde su aprobación hemos trabajado de manera incansable para conseguir que el gobierno de España las hiciera efectivas a partir de enero de 2022; pero lo cierto es que, hasta el momento, hemos recibido información sobre el estado de esta cuestión, y nos preocupa que esta pasividad que percibimos, frustre la llegada de las ayudas a nuestras empresas, convirtiéndose en una nueva oportunidad perdida para Cuenca, Soria y Teruel", relata la misviva remitida a la Moncloa.

Por eso urgen "la necesidad de conocer el estado de esta importante cuestión", ya incluida en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de este año. Sobre todo, añaden porque "empresas que producían en Asia están planteándose implantarse en Europa" en territorios donde sus costes son menores. Así, le exigen a Sánchez que estas ayudas se interpreten como un "proyecto de país", a través de un "elemento diferencial" como son estas ventajas económicas para atraer inversión a estas provincias despobladas que permitan hacerlas igual de "interesantes" que otras zonas de "países del este de Europa".