Las celebraciones de San Isidro, patrón de los agricultores, han vuelto a ser lo que eran tras dos años tras dos años sin desarrollarse por los imponderables de la pandemia. Esta festividad es una de las más importantes del año para muchos municipios aragoneses, que a lo largo del pasado fin de semana han acogidos distintos actos con motivo de estas fiestas. La mayoría de ellos son romerías, entre las que destacan las que tuvo lugar en las tierras monegrinas, en la ermita de Santiago y la Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes, que congregaron en ambos casos a un gran número de participantes de los municipios de su alrededor.

La primera de estas romerías comenzó temprano en la plaza de la Iglesia de Sariñena, donde se reunieron una veintena de carrozas decoradas con hojas de chopo y flores. Desde allí comenzó el peregrinaje hasta la ermita, donde se celebró una misa baturra, jotas, dances y el reparto de bollos a los cientos de asistentes que acudieron. Esta procesión es una rogativa a la virgen por parte del pueblo y los agricultores piden agua de lluvia para los campos y una buena cosecha.

En la Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes, localizada en el término de Sariñena, la tradicional romería reunió a unas 500 personas, una celebración que llevaba desde 2019 sin poderse realizar, al igual que todas las que se hacen en estas fechas. Hasta este antiguo monasterio llegaron vecinos de dicha localidad y de las más próximas al recinto monacal, Orillena, Pallaruelo de Monegros, Cantalobos, Lanaja, Castejón de Monegros o Cartuja de Monegros, entre otras.

El presidente de la Diputación de Huesca, Miguel Gracia, este viernes en la Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes. DPH

El presidente de la Diputación Provincial de Huesca, Miguel Gracia, asistió a la celebración y destacó «el gran ambiente e importante respuesta» de los habitantes de los pueblos próximos al conjunto artístico, que pudieron celebrar de nuevo uno de los días más importantes del año en esta zona.

Las restricciones sanitarias derivadas del covid-19 obligaron a suspender las citas de 2020 y de 2021, y este año, recuperada casi por completo la normalidad, «teníamos que abrir de nuevo las puertas del monasterio a esta jornada de tradición, encuentro y hermanamiento», señaló Gracia.

En una nota de prensa de la DPH, que es la propietaria de este edificio histórico, resaltó asimismo el valor del «gran» trabajo que se ha realizado durante estos dos años para continuar con la recuperación de este «gran tesoro» que alberga esta comarca.

Alcañiz, Urrea y Muniesa

Uno de ellos, la restauración de las pinturas murales, que se lleva a cabo en la nave de la iglesia, impidió que la tradicional misa se celebrara en el interior del edificio, por lo que se trasladó a la explanada ubicada frente a la entrada al mismo. Se trata de los más de 2.000 metros cuadrados de pinturas con las que Fray Manuel Bayeu decoró parte del templo, trabajos que han obligado a la instalación de grandes andamios que, por otra parte, se han convertido en atractivo turístico para los numerosos grupos de personas que cada fin de semana llegan a La Cartuja de Las Fuentes para conocer in situ este Bien de Interés Cultural.

Otra localidades aragonesas que celebró ayer la festividad de San Isidro es Alcañiz, donde los agricultores conmemoraron el día de su patrón con una eucaristía y una procesión hasta la zona del Cuartelillo, donde tuvo lugar la bendición de los campos del término municipal. En Urrea de Gaén y Muniesa, localidades también de la provincia de Teruel, también celebraron con intensidad esta festividad. H