Dijo Alejandro Blanco el miércoles en la sede del COE que había percibido una brecha en el Pirineo, se supone que en algunos alcaldes y territorios. Se supone porque no lo dijo, pero a ello se agarró para buscar un nuevo horizonte en esta candidatura de los Juegos 2030 que, pese a las repetidas exigencias de Aragón de que haya equilibrio –el cacareado «pie de igualdad»–, cada día parece más catalana.
En Barcelona ni se despeinan, lo ven todo claro. Y hasta Alejandro Blanco le dora la píldora a sus políticos, ensalzando la figura de un Pere Aragonès que, por otra parte, en este asunto siempre ha estado de perfil, casi a la espera de que caiga la presa. Pero Aragón resiste, consciente de que su único futuro pasa por la unidad. Algo así como un todo o nada. La lucha entre la dignidad y el dinero, las infraestructuras golosas que les llenan los ojos a más de uno.
El tema cansa y quizá por eso en las últimas comparecencias Lambán ha cambiado las preguntas sobre el peliagudo asunto por una suerte de declaración institucional, que ayer en el barrio de Jesús comenzó tirando de ironía al felicitar a su homólogo en la Generalitat, Aragonès, por haber conseguido que el COE «haga suya» la propuesta que planteaba Cataluña "desde el principio", posición que ha degenerado en la enésima crisis olímpica.
«En Cataluña se jugaría la Champions y aquí un torneo doméstico de fútbol sala», dice Lambán al hablar del reparto de las pruebas de calidad.
La reacción no tardó. Lambán anunció este jueves el inicio de conversaciones con los grupos políticos aragoneses y otra reunión con empresarios y alcaldes del Pirineo, que ya estuvieron en el Pignatelli el miércoles, para llevar a Madrid una propuesta de consenso y unidad de la que puedan presumir, además, ante el Gobierno de España y Pedro Sánchez, quien de momento no ha respondido a la solicitud de Lambán de poner "orden" en el COE, cuya propuesta descifra Lambán con una comparación: «En Cataluña se jugaría la Champions y aquí un torneo doméstico de fútbol sala».
Y bien, en Cataluña siguen satisfechos con el reparto, lo que precisamente da indicios del desequilibrio que ofende en Aragón. Por si acaso, el vicepresidente de la Generalitat, Jordi Puigneró, apuntó que el 'Govern' no aceptará que Cataluña "pierda pruebas ni peso en una nueva distribución que se pueda hacer de las pruebas", aunque se tengan que redistribuir frente a la decisión de "descolgarse" de Aragón. "Se hizo un pacto y se aceptó", remató.
Lambán afirma que desde la DGA "vamos a seguir en actitud de diálogo, a seguir poniendo propuestas encima de la mesa, como hemos hecho con algunas que nos parecían muy razonadas, atinadas y justas. Aunque no se nos ha escuchado, lo vamos a seguir intentando", explica Lambán, quien recordó que el papel de Aragón «quedaría reducido a mera comparsa», un papel «inaceptable e insignificante».
Esa visión "perjudicial para el Pirineo aragonés y sus estaciones de esquí" la comparten "totalmente" con el Gobierno de Aragón "la mayoría de representantes institucionales y empresariales afectados", aseguró el jefe del Ejecutivo en respuesta a las insinuaciones del COE, que anda cortejando municipio a municipio.
Las migajas
"Alguno puede pensar que más valen unas migajas que nada", en referencia a los pueblos que está tentando Blanco, "pero unas migajas son una clara pérdida de posiciones y de competitividad y una manera de despilfarrar el enorme esfuerzo inversor que está haciendo y va a seguir haciendo el Gobierno de Aragón en nuestras estaciones de esquí", según les trasladó en la mañana de ayer.
Lambán ha vuelto a convocar este viernes en el Pignatelli a los empresarios y alcaldes de Pirineo "para tratar de consensuar con ellos el modelo de propuesta» que elevarían al COE, «sobre todo al Gobierno de España». Al mismo tiempo inició este jueves una ronda de conversaciones con las fuerzas políticas aragonesas, del cuatripartito y de la oposición, para que la propuesta que la DGA lleve a Madrid cuente «con el mayor apoyo social y político».
El presidente recordó una vez más el compromiso que el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, y el máximo responsable del COE, Alejandro Blanco, adquirieron ante la opinión pública aragonesa durante su visita a la capital aragonesa en septiembre de 2021, y aseguraron una candidatura entre Aragón y Cataluña «en estricto pie de igualdad, remarcando mucho esa condición», motivo por el que «acepté trabajar en esa candidatura y formar parte de la misma, ya que sin ese compromiso no habría aceptado de entrada formar parte y no hubiera trabajado por ella».
A quien no ha llamado Blanco es a Jorge Azcón, que ayer trató de hurgar en la herida que quiso abrir un día antes el presidente del COE al apuntar a una posible división interna en las filas socialistas de la comunidad: "Es evidente que el PSOE en el Alto Aragón piensa una cosa y en el Pignatelli otra", afirmó.
"No voy a entrar en las disputas internas del Partido Socialista", añadió Azcón, para quien esta posible fractura "no es una buena noticia" porque "la voz del PSOE debería ser unánime" en Aragón. "Hay dos voces distintas y lo mejor para el buen fin de los Juegos es que pensáramos en un acuerdo que aglutinara al mayor número de agentes dentro de nuestra sociedad", concretó.
La posibilidad de que el COE pase ahora por encima del Gobierno de Aragón y pacte directamente con los pueblos pirenaicos oscenses, le abrió una vía al alcalde zaragozano: "El problema es lo que pasa entre el PSOE y sus socios independentistas y ahora parece ser también lo que pasa dentro del Partido Socialista. El PP no es dudoso a la hora de apoyar los Juegos 2030. Los problemas no están en el apoyo del PP, del que nadie duda".
"Este es un proyecto de España, no es de Aragón ni de Cataluña. Si Cataluña quiere hacer unos Juegos en solitario, fracasará. Aquí solo hay un camino: la colaboración", dice Azcón.
Los problemas, continuó el primer edil, "los tienen internamente los que tienen la responsabilidad de impulsar la candidatura. Hay problemas dentro del PSOE en Aragón, dentro del Gobierno de Aragón y problemas de interlocución entre el Gobierno de Aragón, la Generalitat y el COE", ha dicho.
¿Y qué pasaría si el COE llama directamente al alcalde Azcón para proponerle que Zaragoza sea sede de alguno de los eventos olímpicos? "Yo tuve al principio de todo el proceso una reunión con el presidente del COE y no me ha vuelto a llamar para nada. Nunca. Para nada. Si entiende ahora que su interlocución con el Gobierno de Aragón es más difícil y va a llamar a otros agentes distintos, yo no voy a dejar de recibir las llamadas de nadie. En cualquier caso, este es un proyecto de España. No es de Aragón ni de Cataluña. Si Cataluña quiere hacer unos Juegos en solitario, fracasará. Igual que si Aragón pretende lo mismo. Solo hay un camino: la colaboración".
CS PIDE QUE "TODOS" SE PRONUNCIEN
El coordinador autonómico de Ciudadanos, Daniel Pérez Calvo, cree que la candidatura de los Juegos "transciende esta legislatura y la siguiente, en la que todavía no sabemos quien gobernará". Una decisión de este calado "no puede ser una cuestión únicamente de Lambán". Cuando el COE ponga sobre la mesa la última propuesta, "que seguramente será humillante para Aragón, la decisión no puede recaer solo en el Gobierno de Aragón". Es necesario que todos los grupos políticos, en representación de las Cortes de Aragón, y todos los ayuntamientos afectados se pronuncien. Todos tenemos la obligación de decir si queremos o no los Juegos en las condiciones que nos plantea el COE".
