Para que nadie se sienta tentado de aceptar las «migajas» --así las llamó Lambán-- que le sobren a Cataluña y reparta el Comité Olímpico Español, el Gobierno de Aragón arbitró rápido nuevas reuniones en el Pignatelli, ya fueran presenciales o telemáticas. Despachó ambas en menos de 3 horas, de tal manera que reagrupó a todos sus sectores para mostrar fortaleza y evitar embaucamientos a los posibles díscolos. Será el territorio ahora el que contribuirá en la redacción de la nueva contrapropuesta que presentará Aragón la próxima semana ante el COE, que dijo que citaría de nuevo a las partes para tratar de avanzar.
La propuesta aragonesa de reparto equilibrado consiste en hacer lotes agrupándolos por niveles, por calidad de las distintas pruebas, de tal manera que Cataluña y Aragón tengan que elegir un paquete en el que haya pruebas más y menos importantes. «Si se asumiera eso tendríamos el 70% del camino recorrido, esperamos que se acepte», dijo ayer Javier Lambán, para quien «a veces resulta desolador que algo tan justo y razonable como esto necesite tanto esfuerzo de comunicación ante la sociedad».
El presidente aseguró que Aragón mantendrá su «tono propositivo» para que «resulte triunfadora» su propuesta de reparto equilibrado de las pruebas. «Se nos podrá acusa de cualquier cosa, pero no de introducir sorpresas, disfunciones o una alteración del compromiso inicial», dijo Lambán, que ha tenido «conversaciones con altas instancias de la gobernanza de este país», pero no con Pedro Sánchez.
«Desde Aragón estamos poniéndonos de acuerdo todos en algo que no debería resultar extraño ni nada por el estilo», continuó Lambán, quien insistió: «Pretendemos tener unos Juegos Olímpicos en 2030 en el Pirineo para ponerlos en valor y que sea un proyecto de Estado» porque «o es de España o no hay proyecto».
Después de advertir de que recibir «las migajas» significa «perder de manera irremisible», Lambán manifestó que no hay división en el Pirineo aragonés, sino que tanto alcaldes como empresarios de están interesados en los Juegos. «Los alcaldes y empresarios del Pirineo deben tener claro que el Gobierno de Aragón se va a dejar la piel por conseguir un acuerdo».
En tono irónico, el jefe del Ejecutivo apuntó que «uno de los logros» que podría conseguir es que la Generalitat «empezara a no culpar a los demás de todo lo que les pasa», lo que sería «dar un paso de gigante para normalizar la política española y las relaciones de Cataluña con España».
En el Pignatelli, «la reunión con los alcaldes y empresarios del Pirineo ha servido para mostrar unanimidad, la unidad de todo el territorio con el Gobierno de Aragón en la estrategia que preparamos para la candidatura». Son palabras de Felipe Faci, que ayer palpó de primera mano la postura generalizada, «unánime», de los tres valles del Pirineo aragonés en el momento de defender los intereses de la comunidad ante el COE y Cataluña.
El mantra es conocido desde hace semanas: la candidatura olímpica de 2030 debe ser equilibrada. «Hemos coincidido en que no compartimos la propuesta del COE, que no es equilibrada y perjudica al Pirineo aragonés», remachó el consejero tras la reunión.
Faci se siente especialmente satisfecho por comprobar que los pesos pesados del Pirineo, tanto en el sector económico como político, ven en el Gobierno de Aragón el «único interlocutor» de la comunidad a la hora de sentarse en una mesa tanto con el COE como con los representantes catalanes.
Los alcaldes
«Los alcaldes me acaban de decir que nosotros somos los interlocutores ante el COE, como lo hemos sido siempre». «El único que negocia es el Gobierno de Aragón», sentenció Faci para espantar dudas e incertidumbres. «Lo que no puede ser es que haya quien nos intente dividir. Aquí no ha habido ningún discrepante».
Eso sí, alcaldes y empresarios también quieren que sus opiniones se tengan en cuenta en el momento de diseñar una propuesta que llevar al COE. «La propuesta la estamos preparando y la tendremos lista pronto. Los representantes del Pirineo nos dijeron que querían participar y así será».
Las estaciones de esquí también cerraron filas con el Gobierno de Aragón. Candanchú y Astún, las dos únicas que no pertenecen al Gobierno de Aragón, se reunieron en el Pignatelli con Marta Gastón, presidenta de Aramón, para expresar su rotundo apoyo a una candidatura de unidad que sea liderada por la DGA y en la que todos vayan alineados.
La consejera Gastón compareció junto a Jesús Santacruz, presidente de Eivasa (Estación de Invierno Valle de Astún SA), y Fernando Montón, consejero delegado de Candanchú, que no mostraron ni una fisura pese a que Alejandro Blanco, presidente del COE, dejó entrever que parte del territorio pirenaico aragonés había mostrado su interés en negociaciones paralelas.
El COE no se ha puesto en contacto con ninguna de las estaciones. Ni con las pirenaicas de Aramón (Formigal, Panticosa y Cerler), ni con las privadas.
No obstante, el COE no se ha puesto en contacto con ninguna de las estaciones. Ni con las pirenaicas de Aramón (Formigal, Panticosa y Cerler), ni con las privadas. «Vamos todos juntos, toda la nieve de Aragón, y queremos comunicar que todas las estaciones apoyaremos la postura que el Gobierno determine», expresó Santacruz, rotundo en la siguiente afirmación: «Somos una piña y así avanzaremos. No hay que olvidar que los Juegos Olímpicos son una carrera de largo recorrido».
Montón destacó el trabajo y las inversiones que se están realizando desde la DGA, lo que provocará que Aragón sea olímpico «mucho antes de 2030» gracias a la unión de estaciones, que le permitirá tener un gran dominio esquiable «con unas instalaciones de alto nivel».
«A nosotros nadie nos ha llamado ni nos ha sondeado», aseguró el consejero delegado de Candanchú, que respaldó las palabras de Gastón: «Las estaciones son el motor del territorio y solo cabe apoyar la propuesta en la que está trabajando el Gobierno de Aragón». «Que a nadie se le pase por la cabeza que pueda haber fisuras en nuestros centros invernales», zanjó contundente la consejera.
