Las colas de clientas que se agolpan para ser las primeras en acceder al primer día de rebajas de El Corte Inglés se han vuelt a vivir esta mañana frente a la conocida puerta de cañones en el centro comercial de Sagasta en las que son las primeras rebajas sin ningún tipo de restricciones.

Todas han querido ser las primeras en aprovecharse de los descuentos en las marcas, pero la verdad es que han sido muchos, prácticamente la mayoría, los clientes que llegaban a las tiendas y, por sorpresa, se encontraban con los descuentos.

La tecnología también registra grandes descuentos. | ANDREEA VORNICU

«Yo he venido a primera hora a devolver unas cosas y salgo cargada», afirmaba Teresa con los brazos llenos de bolsas rojas de El Corte Inglés. Ella ha sido una de las clientas que se ha encontrado con los descuentos por sorpresa. «No lo sabía, además nunca había venido el primer día y la verdad es que es mucho más cómodo, todo lo que me ha gustado estaba en mi talla y no había mucha gente como para que fuera agobiante», ha asegurado la mujer.

Carmen tampoco sabía que se encontraría con descuentos cuando llegara al establecimiento. «Este año lo han publicitado poco y yo no sabía que iba a haber rebajas pero ya que estamos pues habrá que aprovechar», ha explicado la clienta.

Los consumidores buscan el mayor ahorro posible | ANDREEA VORNICU

También ha habido clientas más aplicadas que llegaban al establecimiento sabiendo que es lo querían llevarse a casa. «Estuvimos ayer y ya, sabiendo que hoy empezaban las rebajas, miramos un par de cosas y hoy hemos venido a ver si estaban rebajadas», ha comentado Elena Valero junto a su madre.

Entre lo más comprado las clientas coinciden, ropa de baño, looks para las vacaciones de verano y renovar el fondo del armario. Además, la mayoría asegura que las prendas de nueva colección son «territorio prohibido».

Por ejemplo, en el caso de Teresa las gangas aparecieron en la sección de zapatería. «Todos los años aprovecho para comprarme zapatos de marca que está a un precio mucho más bajo y que no podría comprarme durante el resto del año.

Un impulso comercial

No solo los clientes han celebrado la llegada de las rebajas, los comerciantes también se han mostrado muy ilusionados frente a la campaña que arrancaba esta mañana y que durará hasta aproximadamente finales de agosto. Un claro ejemplo han sido las encargadas de la tienda de moda Pilar Prieto situada en Paseo Las Damas. «Esta mañana ha venido mucha gente y las ventas han ido muy bien», cuenta la encargada del establecimiento, Rosa Gallego. «Muchas clientas nos cuentan que se van a la playa o que se van de vacaciones y siempre les hacen falta alguna cosita de verano, bermudas o algo más fresquito», añade Gallego.

El Corte Ingles de Sagasta registro mucho moviiento ayer. | ANDREEA VORNICU

Por el momento, aunque las grandes superficies han arrancado ya con el 50% en muchos de los productos, en el pequeño comercio los descuentos están más medidos y rondan en torno al 30%. Aun así, las responsables aseguran que olas rebajas son un proceso que va evolucionando. «Hoy los que esta rebajado esta como unos 5 euros por debajo del precio anterior y ahora cada veinte días aproximadamente iremos bajando hasta en cuatro ocasiones» ,ha explicado Gallego.

Además de celebrar la llegada de las rebajas, en otros establecimientos celebran el auge de las ventas en los últimos meses. «En doce años que llevamos abiertos nunca había visto una cola semejante para comprar un traje», contó María José, dependienta de la tienda Shenior Collection situada en la calle León XIII. «Todos los eventos que no se ha podido celebrar en los dos últimos años se han concentrado en dos meses y eso se ha traducido en muchísimas ventas», aseguró la dependienta.

La moda es lo más consumido en este periodo. | ANDREEA VORNICU

No todos los comerciantes han vivido la primera jornada de rebajas con la misma ilusión. Para María Pilar Beltran, dependienta en la tienda de ropa infantil Guillom, la mañana ha sido «muy tranquila». «Aun no tenemos puestos los carteles grandes e igual por eso no viene tanta gente, pero la que ha venido no ha comprado demasiado, miran mucho pero no terminan de decidirse, a ver si cuando pase unos días vamos a mejor», añade Beltrán justo antes de cerrar la persiana en la primera mañana de rebajas veraniegas de Zaragoza.