Borja con todos los sentidos es un proyecto inclusivo promovido por el ayuntamiento de la localidad para acercar la cultura, patrimonio y turismo de la ciudad a todas las personas, incluso aquellas con discapacidad auditiva, visual, física o intelectual. El Museo de la Colegiata, el Museo Arqueológico, el Santuario de la Misericordia y la Casa Consistorial, entre otros edificios emblemáticos, han incorporado tecnología para que vecinos y visitantes disfruten de una experiencia plena y, de paso, permita que Borja se posicione en Aragón como uno de los primeros destinos de turismo de accesibilidad.

Borja con todos los sentidos se puso en marcha en 2019 y este año ha sido finalista de un premio en la Feria Internacional de Turismo (Fitur) como propuesta pionera e innovadora. En una primera fase, el consistorio trabajó en la adecuación de los contenidos informativos para personas con discapacidad visual y auditiva de tres de los monumentos más significativos: el Museo de la Colegiata, el Museo Arqueológico de San Miguel y el Santuario de la Misericordia. Desde entonces, los visitantes pueden visionar videos accesibles que incluyen lengua de signos en castellano y subtítulos, así como audio descripción para personas con discapacidad visual.

Borja ha incorporado pictolibros y tablet con app accesible en los museos. Ayuntamiento de Borja

En los museos de la Colegiata y Arqueológico se ha desarrollado una signo guía, una guía en lengua de signos en la que también se incluyen subtítulos para que las personas con discapacidad auditiva dispongan de la misma información que se ofrece al resto de turistas en las visitas guiadas. Las personas con esta discapacidad también pueden acceder al contenido existente en los códigos QR a través de sus teléfonos móviles o bien hacer uso de las tablet disponibles.

Las personas con discapacidad visual a su vez pueden acceder a la información de los museos y orientarse a través de balizas bluetooth que lanzan la información de forma locutada en MP3 a sus dispositivos móviles o tablet. También existen varios ejemplares de pictolibros en los que se recoge la información más relevante de la ciudad en braille, así como con texto de gran tamaño y con alto contraste cromático. Estos pictolibros incluyen además varias reproducciones gráficas en alto relieve, como el arco de la Puerta de Zaragoza o el Ecce Homo antes y después de su restauración, para que las personas con ceguera, baja visión o sordoceguera puedan acceder a estos contenidos. Además, la Ruta de guiado sensorial por el casco urbano utiliza sonidos 3D y tecnologías avanzadas de navegación por satélite a través de una app.

Mientras, Borja con todos los sentidos avanza en la mejora de la accesibilidad en calles, edificios y museos dando forma al proyecto de turismo adaptado a todas las personas y prioridad a los peatones y personas con movilidad reducida en el casco urbano. También se va a crear una ruta cultural con códigos QR en 15 edificios con videos e información del lugar en lengua de signos, subtítulos, voz en off y braille. Para disfrutar de su rico patrimonio, el ayuntamiento le invita a conocer Borja con todos los sentidos.

El fenómeno del Ecce Homo cumple 10 años

El Ayuntamiento de Borja está ultimando para el próximo 3 de septiembre un entrañable acto para celebrar el 10º aniversario de la restauración del Ecce Homo. Ya han pasado 10 años desde que el pincel de Cecilia Jiménez recuperase la obra original de Elías García Martínez, en el Santuario de la Misericordia, y diese la vuelta al mundo.

Para conmemorar este hito histórico, el consistorio organizará un evento en el que se premiará a los medios de comunicación que en esta década han difundido y destacado el Ecce Homo de Borja, así como la figura tanto de su restauradora como de su autor original. La gala tendrá lugar en la iglesia del Santuario.

Durante estos 10 años, más de 235.000 personas han visitado la obra en Borja. Pese a que los dos últimos años han estado condicionados por el covid-19, la afluencia de visitantes han vuelto a ser registrar las cifras previas a la pandemia. Como desde el principio la noticia traspasó fronteras, muchos son los visitantes de España y del extranjero que se desplazan para disfrutar in situ del Ecce Homo borjano, convertido hoy día en uno de los principales reclamos culturales y turísticos del municipio.

Y de ser un fenómeno social, el Ecce Homo se ha transformado en un fin social, ya que el dinero que se recauda de las entradas, merchandising y derechos de imagen se destina a becar a los mayores de la Residencia Santi Spiritus sin recursos.