La parrilla de rutas programadas para este verano por la compañía de vuelos de bajo coste Ryanair está sujeta a cambios de última hora y en medio de un conflicto laboral que, hasta ahora, solo había provocado retrasos en las salidas y llegadas en la terminal de pasajeros del aeropuerto de Zaragoza. Hasta ahora que la aerolínea ha decidido cancelar los vuelos previstos todos los miércoles entre la pista aragonesa y la de Londres-Stansted. Una medida que entrará en vigor el próximo «20 de julio» y que se hará efectiva «hasta el 31 de agosto».

Se desconocen los motivos que han llevado a Ryanair a tomar esta decisión, que deja ahora sin avión a los pasajeros que tuvieran reservado pasaje en esos días. Así, los aviones afectados son, en total, 14 hasta finales del mes que viene, concretamente siete de llegada a la terminal aragonesa en Garrapinillos y otros siete que debían partir hacia el aeropuerto londinense de Stansted los días 20 y 27 de julio, y 3, 10, 17, 24 y 31 de agosto.

Se trata de una modificación que la compañía no ha explicado y que se produce tras las primeras jornadas de huelga a finales de junio y primeros días de julio. Una protesta que ahora se ha extendido a otras compañías como Brittish Airways o Easyjet, que no operan en Zaragoza