Un equipo de arqueólogos busca en Loscorrales los restos de dos víctimas de la guerra civil, asesinadas por el bando franquista entre el 3 y el 5 de agosto de 1936. Los trabajos de exhumación comenzarán el próximo 22 de julio en la tapia del cementerio viejo, el lugar donde presumiblemente se dio sepultura a los restos de dos hombres.
Sebastián Bretos era un militante de la CNT que fue ejecutado a los 36 años de edad cuando no había transcurrido ni un mes del inicio de la contienda española. Según ha podido averiguar el equipo de arqueólogos del que forma parte Javier Ruiz, la defunción de Bretos y de otro hombre fue anotada en el registro civil como la muerte de dos hombres sin identificar. El registro de ambos decesos tiene fecha del 5 de agosto.
"Parece ser que a Bretos lo llevaron preso a Ayerbe y que fue asesinado cerca de Loscorrales junto a otro hombre. Dejaron los cuerpos abandonados en el monte, pero los vecinos, al encontrar los cuerpos unos días después, podrían haberlos enterrado en la tapia del cementerio", comenta Javier Ruiz.
Un sobrino puso sobre la pista a los arqueólogos
Las pistas que han llevado a proceder con esta exhumación tienen una curiosa historia. Cuando se celebró el homenaje a las 26 víctimas de Angüés en febrero de este año, el autor de la escultura que allí se colocó comentó a los arqueólogos que llevaba tiempo buscando a un tío abuelo suyo que había sido asesinado cerca de Loscorrales. Era Sebastián Bretos.
El equipo se puso a investigar y halló las evidencias de que los restos podrían encontrarse en el antiguo cementerio de la localidad, ahora clausurado. "Si los restos están en el lugar donde cree la familia, podremos proceder a terminar la exhumación en tres o cuatro días", estima Ruiz.
La exhumación ha sido promovida por la Asociación por la Recuperación e Investigación contra el Olvido (Arico) y se financiará con fondos de la Diputación Provincial de Huesca (DPH) y de la Secretaría de Estado de Memoria Democrática.
No es la primera exhumación que se lleva a cabo en la zona. Ya en los años 80, en los primeros compases de la Transición, en Loscorrales tuvo lugar la exhumación de una fosa común. Por aquel entonces eran los familiares quienes se encargaban de los trabajos, dando sepultura en Santa Eulalia de Gállego a los huesos de seis vecinos asesinados en agosto de 1936. Una placa recuerda este hecho en la localidad oscense.
