La Casa del Ermitaño de la ermita de San Antonio, situada en el término de Mosqueruela, en Gúdar-Javalambre, ha sido restaurada este último año por el taller de empleo de la localidad. El edificio se encontraba en mal estado debido a un incendio que lo dejó sin techo. Este hecho, junto al paso del tiempo, hizo que el interior se llenara de vegetación, con lo que la ermita se hallaba muy deteriorada.

El taller de empleo ha arreglado la Casa del Ermitaño limpiando el interior de maleza, reconstruyendo el techo y poniendo suelo o reparando el anterior, así como rejuntando las paredes y construyendo unas nuevas escaleras para subir a la campana. Ayer domingo, la Casa del Ermitaño realizó la primera jornada de puertas abiertas para que todos los vecinos y vecinas así como visitantes pudieran observar la reparación.

Detalle del suelo empedrado. EL PERIÓDICO

La jornada de puertas abiertas comenzó a las 18.00 horas. A las ocho de la tarde se celebró un recital poético de música sefardí con la soprano Iris Almenara y el guitarrista flamenco David Roldán. A continuación, se realizó una cena campestre. Y finalmente, a las diez de la noche, hubo una actividad astronómica a cargo de Teruel Celeste: Selene, la luna llena más observada del año.

Con estas actividades se dio por inaugurado este nuevo espacio restaurado de Mosqueruela, "un lugar con encanto dentro de un pueblo mágico", en palabras de Alba Lucea, alcaldesa de la localidad.