bullying

Ella es partidaria de buscar «una solución personalizada» para los casos de abuso en las aulas tanto en lo que se refiere a los acosados como a sus acosadores.

«Hay un dilema abierto, pues se trata de determinar quién tiene que someterse al cambio de centro escolar, si la persona acosada o la persona o grupo que acosa. Y lo cierto es que en cada caso se deberá aplicar una solución diferente», afirma. «Habrá situaciones en las que será necesario un cambio estructural e importante para que la persona pueda volver a su vida normal en el colegio y fuera de él», agrega.

La cuestión que se plantea, subraya, es cómo abordar el problema que plantean los abusadores . «Desde luego necesitamos comprender cómo han llegado a ese punto y tener muchas herramientas y mucha comprensión del mundo emocional de los niños y niñas y de su desarrollo evolutivo», afirma.

Hay determinadas emociones que si el mundo adulto no las sabe regular o moderar, destaca, «al final los menores que acosan actúan sin una clara noción de las consecuencias que su conducta tiene en las otras personas», explica. «Eso los adultos lo sabemos, pero en el caso de los niños no se tiene en cuenta que la conducta pueda influir tantísimo en el sufrimiento de otra persona, carecen de ese control, de esas estructuras cerebrales que ayudan a prever las consecuencias de los actos».

Rato asegura que no se ha detectado un aumento de las consultas sobre salud mental de la población infantil y juvenil. «Lo que en realidad ha pasado es que a raíz de la pandemia sí ha habido un incremento de la demanda de atención psicológica, pero en todos los grupos de edad, desde menores y jóvenes al de los adultos y a la población mayor», precisa.

Con respecto al caso de Saray piensa que no se puede hablar de que sea un asunto que haya escapado al control y a los sistemas de detección. «Más bien lo que ha ocurrido es que se ha producido un indicio extremo de que había un problema». Por ello, recalca. Y cuando eso sucede, sostiene, «es normal que la sociedad se pregunte cómo es posible y si se podía haber evitado». H