Las comisiones ejecutivas regionales de CCOO y UGT en Aragón se reunieron este lunes para analizar la situación de la negociación colectiva y el diálogo social en la comunidad con el fin de reforzar la unidad de acción ante un curso económico y político que plantea importantes retos. Ambas organizaciones se reafirman en la exigencia de una negociación colectiva que garantice el poder adquisitivo de los salarios y ante la negativa de las patronales «apuestan por el conflicto».

Según el diagnóstico de ambas centrales, tras la crisis originada por la pandemia, «sorteada fundamentalmente gracias a medidas tomadas en el ámbito del diálogo social», las turbulencias de los mercados producidas por la reactivación económica (crisis de suministros, encarecimiento de materias primas…) se han agravado debido a las consecuencias de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, sobre todo por la «utilización» que el régimen de Putin ha hecho de los suministros de hidrocarburos y gas.

El incremento de los precios y el impredecible desarrollo de la guerra en el este de Europa «introducen incertidumbres que deberían afrontarse con el mayor nivel de cohesión social posible, y ello pasa por potenciar el diálogo social y, singularmente, la negociación, y el acuerdo, salarial», según señalan en un comunicado UGT y CCOO, que exigen a la patronal volver a la mesa de negociación del acuerdo de negociación colectiva. «La mejor medida para superar esta crisis es incrementar los salarios de manera moderada y mantener su poder adquisitivo mediante cláusulas de garantía», argumentan.

"La experiencia de las crisis pasadas nos ofrece dos formas diferentes de afrontarlas, la de 2008, mediante la imposición y la devaluación salarial, que nos dejó cicatrices sociales que aún no se han cerrado; y la de la pandemia, mediante el diálogo social, que ha permitido una rápida salida con la recuperación del empleo y una línea de recuperación económica sostenida", han manifestado desde CCOO-UGT.

Los sindicatos han valorado que "el Gobierno y los agentes sociales deben afrontar la actual crisis desde el diálogo". En primer lugar han pedido que la patronal vuelva a la mesa de negociación del acuerdo de negociación colectiva.

"La mejor medida para superar esta crisis es incrementar los salarios de manera moderada y mantener su poder adquisitivo mediante cláusulas de garantía", han apuntando desde CCOO-UGT agregando que de ello "depende el mantenimiento del motor del consumo interno, pero también una salida de la crisis que no pase, como en 2008, por una nueva devaluación salarial".

Pacto de rentas

En segundo lugar, desde las entidades sindicales han pedido que el Gobierno trabaje desde una perspectiva de "diálogo social tripartito" para lograr un pacto de rentas que garantice el mantenimiento del poder adquisitivo de los colectivos que dependen de los presupuestos, como pensionistas y empleados públicos y que eleve el salario mínimo interprofesional hasta el sesenta por ciento del salario medio.

Han solicitado también que este incluya medidas de control de precios, tanto de la energía como de bienes y servicios básicos y que mantenga "un nivel de protección social suficiente para los colectivos más vulnerables".

Asimismo, desde las entidades sindicales han instado al Ejecutivo a que establezca medidas fiscales que "permitan gravar los beneficios extraordinarios de algunos sectores con el fin de contar con medios suficientes para financiar las medidas".

En lo que se refiere a Aragón, las medidas del Gobierno central "deben complementarse para recuperar los servicios públicos básicos, como la anidad, la educación o los servicios sociales, para lo que es imprescindible alcanzar consensos, pero también contar con una financiación suficiente", han manifestado.

"El diálogo social es el instrumento adecuado para afrontar los retos de una situación incierta y mantener la cohesión social, y es también necesario para el cambio de modelo económico que los fondos europeos de recuperación han de propiciar", han zanjado desde CCOO-UGT.