Cuca Gamarra, portavoz del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, reclamó este domingo a Javier Lambán en Zaragoza que "abandone el seguidismo de fiel escudero de Sánchez" y se una a "la revolución fiscal del PP". Para bajar impuestos, dijo, "tiene al PP, no necesita a nadie más y puede hacerlo de manera inmediata". Ni el guante ni el guantazo los recogió ayer el presidente de Aragón, que aseguró que lo que está haciendo su Gobierno "no es una revolución fiscal como decía ayer la dirigente del Partido Popular venida de Madrid a auxiliar a Jorge Azcón".
"Lo que estamos haciendo es un ejercicio sensato, ponderado, de análisis de la realidad fiscal aragonesa para plantear su posible reformulación", explicó este lunes Lambán, que ya ha mantenido las primeras conversaciones con los socios de Gobierno en este sentido mientras esperan la respuesta de los grupos a la carta remitida por Hacienda, contestación para la que tienen plazo hasta el 10 de octubre.
El jefe del Ejecutivo explicó que es "preocupante" lo que se dijo este domingo en Zaragoza. "Lo que está pasando en España es francamente preocupante. Lo que están diciendo los organismos europeos es que es contraproducente bajar los impuestos en este momento, y por eso no lo está haciendo ningún país. De hecho, el anuncio de reforma fiscal del Gobierno inglés ha tenido una respuesta por parte de las agencias de evaluación que han situado la deuda inglesa en niveles de deuda basura".
"Se está lanzando un mensaje a la ciudadanía de que los impuestos son una especie de atraco a mano armada a los ciudadanos y eso es un mensaje pernicioso, nocivo, porque pone en cuestión al propio Estado, el Estado del bienestar, los servicios públicos..."
"La revolución fiscal de la que habla el PP no es tal, lo que está haciendo es populismo fiscal, irresponsabilidad fiscal. Se está lanzando un mensaje a la ciudadanía de que los impuestos son una especie de atraco a mano armada a los ciudadanos y eso es un mensaje pernicioso, nocivo, porque pone en cuestión al propio Estado, el Estado del bienestar, los servicios públicos… Pone en cuestión prácticamente todo lo conseguido en 40 años de democracia", ha incidido Lambán.
El presidente aragonés quiere animar al PP "a que piense que la fiscalidad es un medio y no un fin". Tiene que acompasarse "al modelo social que pensamos, qué servicios públicos queremos y cómo los pagamos".
En ese debate social "nos encontraremos con el PP", pero en ningún caso "en subastas frívolas a ver quién baja más impuestos", dijo el presidente que admite que se puede pensar "en una cierta revisión de la política fiscal, pero hecha con sensatez y diálogo, que ha de implicar en primer lugar a los socios del Gobierno y después a los grupos de la oposición".
Los roces por el tranvía
Pese a la disonancia repetida entre Javier Lambán y Jorge Azcón, repetida desde el viernes cuando se conoció la sentencia del tranvía que obliga al Gobierno de Aragón a pagar 24,5 millones de euros al Ayuntamiento de Zaragoza, que provocó el envío el de una carta del jefe del Ejecutivo al primer edil zaragozano y la réplica de este, "las relaciones son correctas y cordiales", dijo el presidente, que admitió que "de vez en cuando se ven sometidas a algún tipo de tensión que siempre se resuelve".
En la carta que remitió Lambán al Gobiermo de la ciudad, "le decía que tenemos la firme determinación de cumplir con la sentencia", aunque de paso le recordó al alcalde "una serie de incumplimientos" respecto al anterior convenio firmado. "Pero no por hacerle ningún reproche sino por recordarle que si existe buena voluntad todos esos incumplimientos se deben resolver. En caso de no resolverse sí que se quebraría la confianza entre las instituciones, porque los acuerdos están para cumplirlos", dijo Lambán que. aseguró que el Gobierno, en relación con la deuda del tranvía, "va a cumplir”.
Otra de las certezas que trasladó este lunes Lambán es que "no habrá adelanto electoral en Aragón", con el 28 de mayo como fecha "segura" para los comicios, independientemente de que Pedro Sánchez decida anticipar la fecha de las generales e incluso hacer un superdomingo en el que coincidan con las municipales y las autonómicas, posibilidad esta de la que dijo no saber nada.
