Han podido más las ganas de volver a vivir unas Fiestas del Pilar en la calle que la subida de precios, la inflación creciente y la crisis energética que salta a la vista. No hay datos de facturación global, llegarán a lo largo de estos días, pero la percepción entre los hosteleros, los de día y los de noche, es que los números han sido parecidos a los de antes de la pandemia. De momento, la mitad de los hosteleros consultados han hecho un balance positivo de la semana pilarista.
Entre el resto, las primeras fiestas tras la crisis del covid deja un tercio de hosteleros que considera que han sido "malas o muy malas" para sus negocios, mientras que otro 35% cree que han sido "normales", según la encuesta elaborada por la Asociación de Empresarios de Cafés y Bares de Zaragoza entre sus asociados.
Además, según los datos aportados por los establecimientos de Zaragoza, un tercio de los negocios ha aumentado su facturación respecto a las últimas Fiestas del Pilar (2019), un tercio ha mantenido sus ingresos y un tercio ha visto cómo caían.
La afluencia de público a los establecimientos deja unas conclusiones similares, ya que el 53,5% valora la concurrencia como excelente (18,6%) o buena (34,9%), mientras que el 18,6% considera que ha sido normal, el 18,6% mala y el 9,3% muy mala. En este aspecto también influye la situación de los bares, restaurantes, cafeterías y pubs, ya que los actos que atraen a más gente suelen celebrarse en el centro de la ciudad.
De hecho, hasta el 40% de los encuestados están descontentos con la programación de actividades del ayuntamiento, mientras que un 30% se muestran satisfechos y otro 30% tienen una opinión neutral.
Debido a este aumento del trabajo, el 44% de los establecimientos ha contratado a personal extra durante las Fiestas del Pilar, mientras que el 56% han afrontado estos días con su plantilla habitual.
En cuanto a las previsiones para lo que queda de año, tan solo el 2% tiene unas expectativas excelentes y un 19% buenas, mientras que el 35% creen que el último trimestre será "normal" y un 44% cree que los últimos meses de 2022 van a ser malos (37%) o muy malos (7%).
Salta a la vista que en determinados sitios ha habido "muchísimo" público, dice José María Marteles, presidente de la Asociación Cafés y Bares, seguro de que ha sido "muy positivo" que haya habido una fiesta "más diversificada" a lo largo y ancho de la ciudad que otros años, lo que puede arrojar en determinados sectores datos iguales o superiores a los del año 2019.
Se admite que la climatología ha ayudado, con temperaturas suaves, sin apenas cierzo ni lluvia, pero se echa en falta otra planificación de los días no lectivos elegidos desde Educación. En esta ocasión, que el Día del Pilar cayera a mitad de semana (miércoles) no ha ayudado de cara al turismo. Sin embargo, se entiende que a los alumnos de los diferentes centros se les debería haber dejado libre jueves y viernes –son días donde hay muchas más actividades– que lunes y martes como se decidió.
Desde Cafés y Bares aseguran que hay establecimientos que ya han mostrado su satisfacción y agradecen el comportamiento del público en general, que no ha protestado por el aumento de precios consciente de la gran subida que se ha producido en las materias primas.
Según Hostelería Digital, los precios de las actividades de restauración han crecido una vez más en septiembre, hasta un 6,8% respecto al mismo mes del año anterior, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Esta tasa supone un incremento de cinco décimas respecto a agosto. Sigue impulsada por el aumento en los alimentos y bebidas no alcohólicas, que sube seis décimas escalando hasta el 14,4% en septiembre, y los de la energía que suponen un 22,4% más que el mismo mes del año anterior. Los precios de los restaurantes y bares continúan por debajo del IPC general que en septiembre se sitúa en el 8,9%.
En el ocio nocturno también se ha percibido un Pilar que puede ser "de récord", basados en datos como que varios días se agotaron las entradas en la venta anticipada, según explica Miguel Ángel Salinas, de la Asociación de Discotecas y Salas de Fiesta de Zaragoza.
"La gente estaba con muchas ganas, se ha notado que ha sido un Pilar de los mejores de los últimos años", dice Salinas, que cree que zonas como Casco Viejo han agradecido que no hubiera dos espacios gigantes de ocio al desaparecer las actividades y conciertos en el Parking Norte.
Los puestos de comida instalados en la plaza Aragón también han constatado ese aumento de afluencia. "Casi todas las casetas han estado llenas, hemos contabilizado unas 75.000 personas. Eso sí, se ha notado que la gente tenía ganas de salir pero menos gasto", explica la presidenta de la Federación de Casas Regionales y Provinciales de Aragón, Ana María Jesús Notivoli.
