La Comunidad de Madrid es desde hace años el principal destino de las empresas radicadas en Aragón que deciden trasladar su sede social, debido seguramente atraídas por la menor carga fiscal de la que ha hecho bandera esta región central. La tendencia se ha intensificado de forma notable en el tercer trimestre de 2022, cuanto un total de 66 empresas ubicadas en la comunidad emprendieron rumbo a la capital española, una cifra mayor incluso que la registrada en todo el año anterior (62), según el Estudio sobre Cambios de Domicilio, publicado recientemente por la consultora Informa D&B, filial de Cesce. La inclinación por la gran metrópoli nacional es patente, ya que el 80% de las firmas que se marcharon en dicho periodo lo hicieron a ese destino.
Los datos del informe ponen de relieve que se ha reavivado la fuga de empresas en pleno debate sobre la diferente política de impuestos que aplican las comunidades autónomas y acusaciones de competencia desleal. A las ventajas con que cuentan País Vasco y Navarra por gozar de un régimen fiscal propio, se ha sumado la controversia por la decisión de la Junta de Andalucía, gobernada por el PP, de suprimir un impuesto que afecta solo a los ricos como es el de Patrimonio, siguiendo así los pasos dados por Madrid hace años.
Lo cierto es que el ritmo de la mudanzas a la capital del reino se ha intensificado claramente. Entre los meses de junio y septiembre decidieron dar este paso cinco empresas por semana. Las 66 que lo hicieron en estos tres meses son tantas o más que en un ejercicio completo de los últimos años: 61 en 2021, 45 en 2020, 79 en 2019 y 61 en 2018. No obstante, habrá que esperar a conocer los datos de todo 2022 para saber si este comportamiento es puntual de este trimestre o marca un sesgo.
En cualquier caso, el volumen de traslados es pequeño si se tiene en cuenta que en Aragón hay actualmente más de 120.000 empresas que tiene su sede aquí y que el tipo de negocios que cambian de lugar son, en la mayoría de los casos, pequeños, con un bajo nivel de ventas. Las 66 compañías que se fugaron a Madrid el pasado verano suman una facturación conjunta de 6,1 millones de euros al año, lo que arroja una media de 100.000 euros por cada sociedad mercantil.
El estudio también pone de relieve que Aragón ha vuelto a ser una comunidad con un saldo negativo en los cambios de domicilio de las compañías tras dos años en los que salía a su favor. En el tercer trimestre de 2022 se mudaron de la comunidad 82 empresas y llegaron 45 de otras regiones españolas, lo que arroja una merma de 37 negocios, una cifra solo superada Cataluña (-47) en el grupo de las que pierden. En el mismo periodo del año anterior, la diferencia fue positiva (cinco más), como también lo fue en todo 2021 (10) y en 2020 (13).
Las 66 compañías que se fugaron a Madrid el pasado verano suman una facturación conjunta de 6,1 millones de euros al año, lo que arroja una media de 100.000 euros por cada sociedad mercantil
Además de Madrid, los otros destinos elegidos por las firmas que se fueron de Aragón son Andalucía y Comunidad Valenciana (ambas con cuatro), Cataluña (2) e Islas Canarias (2) y País Vasco, Navarra, Cantabria y Castilla y León (una a cada región). Si se tienen en cuenta las ventas de las empresas que se mudan, Aragón resta 12,8 millones de euros en esos tres meses, de los que 6,1 se fueron a la región del centro, 5,9 a Cataluña y 0,7 al País Vasco.
En cuanto al origen de las empresas que vinieron a Aragón, Cataluña volvió a ocupar el primer puesto, con 17, seguida de Andalucía (11), Madrid (8), Comunidad Valenciana (4), Murcia (2), Navarra (1), Extremadura (1) y Castilla-La Mancha (1). En este caso, se observa que la fuga de firmas catalanas a la comunidad por la tensión independentista se modera. Entre 2015 y 2021, casi 600 tomaron este camino frente a menos de 200 que lo hicieron a la inversa.
