El Periódico de Aragón

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El otoño político en la comunidad

El centro-derecha y el proyecto de nuevas alianzas electorales en Aragón

Corrientes del PAR y de Cs admiten haber tenido reuniones entre ellos y con otros partidos en busca de nexos para la cita de mayo

Jorge Azcón (PP) saluda a Ramiro Domínguez (Cs), que ya ha mostrado su intención de abandonar Ciudadanos. | JAIME GALINDO JAIME GALINDO

A la hora de cerrar su intervención la pasada semana en el debate sobre el estado de la comunidad, el líder de Ciudadanos, Daniel Pérez Calvo, dejó un mensaje que para muchos pasó inadvertido pero que tiene un significado sobresaliente a estas alturas de legislatura, cuando a casi nadie le sobran dedos en una mano para contar los diputados que le atribuyen las encuestas a vuelta de las elecciones de mayo. «Quiero ser y compartir la casa común del centro», dijo el jefe de los liberales en Aragón, en lo que fácilmente se puede interpretar como un guiño al PAR, que, si no anda tan tocado como el partido naranja, poco le falta.

Por no tener, el grupo aragonesista no tiene ni la seguridad de llegar a final de mes entero y verdadero. Le queda en medio un juicio en el que sus críticos aseguran tener muchas opciones de que el juez anule el congreso celebrado hace ya más de un año en la Feria de Zaragoza, en aquella tarde bronca que permitió a Arturo Aliaga mantenerse en la presidencia aunque fuera por los pelos.

Desde entonces, el sector disidente del PAR ha estado en silencio y a la sombra. «No se equivoquen, hemos trabajado mucho», dice una de sus primeras figuras, que admite que en los últimos meses ha habido reuniones con Cs. «Con ellos y con otros», cuenta sin citar ni a Teruel Existe ni al PP, que bien se sabe anda detrás también de la absorción de la formación naranja.

Un liberal pone luz a la afirmación parlamentaria primera. «Igual se acaban presentando a las elecciones dos cojos (Cs y PAR) cuando nos vendría mejor que fuese solo uno pero caminase medio bien». ¿Quiere esto decir que hay cercanía? Según se mire no tanta. Hay que tener en cuenta que ambas formaciones tienen un revés. Es decir, un sector crítico con un peso significativo. Se resume fácil. «Todas las puertas están abiertas», afirman los disidentes del PAR, que han quedado absolutamente apartados de la vida del partido desde hace un año. «La integración es nula porque Aliaga no ha querido integrar a nadie y se ha quedado con el 50% del partido, con el 50% más rancio además. Pero que tenga claro que los críticos ni se han disuelto ni han desaparecido de la política».

Un PAR "auténtico" frente a la Ejecutiva

Se pudo comprobar recientemente en un acto «muy potente del centro-derecha» que reunió al PAR «auténtico, de toda la vida, el de verdad», dijo el expresidente José María Mur en esa suerte de homenaje a Hipólito Gómez de las Roces a la que no faltó la primera plana del PP ni el coordinador de Cs en Aragón, pero al que no invitaron al presidente del PAR, Arturo Aliaga. Tampoco a nadie de su Ejecutiva, ni a los diputados autonómicos. Ni siquiera al senador Clemente Sánchez Garnica, que suena como sucesor de Aliaga.

Desde el sector crítico aragonesista aseguran que, pese a los contactos confirmados, no moverán ficha hasta conocerse el resultado del juicio que se celebrará el próximo 22 de noviembre, donde el juez deberá determinar si hubo irregularidades en el censo utilizado por la dirección del partido en el congreso de la formación que ganó Aliaga por una veintena de votos a Elena Allué. Los críticos se ven con opciones de que el juez les dé la razón, lo que sería un varapalo para la actual dirección y conllevaría la correspondiente petición de dimisiones en caso de confirmarse alguna irregularidad.

De producirse cualquier movimiento electoral entre el sector crítico del PAR y el sector oficialista de Cs, este llegaría después de la fecha del juicio. Aun así, los aragonesistas no querrían desprenderse de sus siglas, lo que deja en el aire la incógnita de cuál sería su postura si el juez no les da la razón. ¿Aceptarían entrar como independientes en listas de Cs, que necesita candidatos después de su bajada de militantes y simpatizantes en todo Aragón? ¿O se crearía una especie de confluencia de centro entre las mermadas fuerzas de este espacio político cada vez más reducido?

Los críticos aragonesistas hablan de «refundar el PAR» y de que la oportunidad para cambiar de rumbo es «ahora o nunca». Pero hay que recordar que el PAR tiene una dirección y una Ejecutiva surgida de un congreso oficial hace solo un año.

¿Una "tercera vía" en Ciudadanos?

En la formación naranja no corren buenos tiempos y, pese a tener trazada la ruta de la refundación, con fecha oficial de primarias y asamblea, el proceso no convence y muchas de las caras visibles del partido en Aragón no están de acuerdo con la dirección.

Tanto es así que algunos integrantes del partido ven en él no solo la corriente crítica representada por Somos Ciudadanos y la oficial que encabeza su coordinador, Daniel Pérez, sino una posible «tercera vía» que podría llegar a plasmarse, incluso, en una candidatura para las primarias a la presidencia del Gobierno en Aragón.

Estas mismas fuentes de la formación liberal insisten en el «desgaste» que padece Pérez y su escasa aceptación entre la militancia. «A día de hoy, no tenemos candidato. Pero los votos los tenemos», defienden desde esa tercera vía que todavía no quiere mostrarse abiertamente.

Los críticos, unos y otros, se ven con más fuerza que los aparatos de sus respectivos partidos para conformar listas electorales, una labor en la que están inmersos todos los partidos de Aragón, incluso con la presentación ya de cabezas de lista en las grandes localidades. El tiempo corre, los intereses crecen. Solo quedan seis meses para saber si el centro-derecha es capaz de cimentar un base sobre la que poder tumbar al PSOE y su izquierda.

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