informe publicado en la revista 'science'

Aumentar el pastoreo tiene "consecuencias negativas" en las zonas áridas de Aragón

Un estudio analiza el impacto ecológico en un centenar de espacios del planeta / En la comunidad se ha trabajado en Leciñena, Belchite y Mediana de Aragón

Zona de pastoreo de Leciñena, que se incluyó en el estudio, junto a Belchite y Mediana de Aragón.

Zona de pastoreo de Leciñena, que se incluyó en el estudio, junto a Belchite y Mediana de Aragón. / H. S.

Eva García

Eva García

El pastoreo es una actividad fundamental que sostiene a cientos de millones de personas en el mundo -y también en Aragón-- y es particularmente importante en las zonas áridas, que cubren más del 40% de la superficie de la tierra, y son el hogar de una de cada tres personas que la habitan y de la mitad de todo el ganado del planeta.

La revista Science acaba de publicar un estudio que evalúa estos impactos ecológicos en las zonas secas pero también en zonas frías. Hugo Saiz Bustamante, investigador María Zambrano en la Escuela Politécnica Superior de Huesca y miembro del Instituto de Investigación de Ciencias Ambientales de la Universidad de Zaragoza, ha coordinado el muestreo global de vegetación de 326 ecosistemas áridos de 25 países de 6 continentes; pero en la investigación del proyecto Biodesert han participado un centenar de colaboradores.

El estudio ha seleccionado un centenar de lugares por todo el mundo donde «lo que llueve es menos de lo que se evapora», cuenta Saiz, y ahí se han colocado unas parcelas en zonas en las que «hay mucho, poco y nada de pastoreo». A partir de ahí se ha ido analizado la vegetación o las propiedades del suelo.

En Aragón, los estudios se han centrado en la zona de Belchite, Leciñena y Mediana de Aragón, porque el clima en la comunidad es árido y en estos tres lugares hay divergencia ya que los hay más y menos áridos. Estos municipios se eligieron porque allí ya había trabajado el Instituto Pirenaico de Ecología.

Pero este mismo análisis de plantas, herbívoros, etc, se ha repetido en todos los continentes y en países como Argentina, Australia, Estados Unidos, Namibia, China, irán y en Europa, solo España y Portugal, explica el investigador.

Coordinador

El trabajo de Saiz era el de «coordinar el muestreo de vegetación, decir cómo debían tomarse las muestras de plantas y analizar los datos que me enviaban», cuenta.

Hugo Saiz Bustamante.

Hugo Saiz Bustamante.

Y a partir de ahí evaluar cómo el pastoreo influye sobre los sistemas ecosistémicos, y los «beneficios que dan al ser humano» a través de medir la cantidad de forraje, el CO2 que fijan y ver cómo afecta a estos servicios. Y la conclusión señala el investigador es que «cuanta mayor aridez hay, el aumento del pastoreo perjudica a los servicios».

«No decimos si es bueno o malo, sino que aumentar el pastoreo tiene consecuencias negativas que hay que conocer; y que cuanto más aridez, más negativos» son esos efectos en la tierra y para las especies vegetales que ahí habitan, explica Saiz. Sin embargo, insiste en que sí es constante «el efecto positivo de la biodiversidad en los ecosistemas, por lo que conservar la biodiversidad es siempre una buena opción». Sí que han visto, tras el estudio, que este impacto negativo pasó a ser positivo en las zonas más frías, con mayor riqueza de especies y plantas, al contrario que en las zonas áridas.

Esto significa que «no podemos tenerlo todo» porque lo que es «algo bueno para uno puede que no lo sea para el ecosistema»; y si se opta «por aumentar la producción de carne podemos perder otros servicios», por lo que, señala que los hallazgos de este estudio son de gran relevancia para «lograr una gestión más sostenible del pastoreo», así como para establecer acciones efectivas de gestión y restauración destinadas a mitigar los efectos del cambio climático y la desertificación en las zonas áridas de Aragón y del planeta.

Suscríbete para seguir leyendo