EL SECTOR DEL AUTOMÓVIL

El grupo Tata Motors negocia instalar una fábrica de baterías en Aragón

La compañía automovilística está estudiando levantar una gigafactoría en Zuera, pero la comunidad compite con el Reino Unido para la captación de esta gran inversión

Trabajadores instalan un motor eléctrico en un vehículo en una fábrica del grupo Tata en India.

Trabajadores instalan un motor eléctrico en un vehículo en una fábrica del grupo Tata en India. / FRANCIS MASCARENHAS / REUTERS

Aragón tiene una nueva oportunidad de captar una fábrica de baterías para vehículos eléctricos, que de lograrse garantizaría el futuro del sector del automóvil y generaría un elevado volumen de empleo industrial. El grupo automovilístico indio Tata Motors, propietario de Jaguar Land Rover, está valorando seriamente instalar una gigafactoría de este tipo en la comunidad autónoma, que compite con el Reino Unido en la atracción de esta importante inversión, según ha informado una fuente conocedora de los planes de la compañía a la agencia Reuters.

El director financiero de Tata dijo el mes pasado que el fabricante de automóviles estaba considerando establecer plantas en India y Europa para producir celdas de batería para vehículos eléctricos. En el viejo continente, su objetivo sería proporcionar estos componentes para sus lujosas marcas Jaguar y Land Rover, que tiene instalaciones de fabricación en Gran Bretaña y Eslovaquia.

En unas conversaciones mantenidas a finales del pasado año, la compañía india comunicó al Gobierno presidido por Pedro Sánchez que estaba pesando entre España y Gran Bretaña como las dos ubicaciones principales para esta instalación. Tata se sintió atraída por las ayudas para la industria con que cuenta el Estado español para promover el ensamblaje de coches eléctricos y baterías en el país. Además, una de las ventajas que ofrece nuestro país respecto a Reino Unido es su pertenencia a la Unión Europea.

Visita a Zuera para conocer la ubicación

Sobre este proyecto y sus posibles ubicaciones, un portavoz de la compañía automovilística dijo que «como política y práctica, Tata Motors no comenta sobre especulaciones». El Gobierno español tampoco respondió a preguntas de la citada agencia de noticias. 

La ubicación que está valorando Tata en España es la Plataforma Logística e Industrial de Zuera, promovida por el Gobierno de Aragón, que contará con 150 hectáreas de superficie. Se trata del mismo emplazamiento en el que el grupo Seat-Volkswagen había valorando levantar una gigafactoría de baterías, pero el consorcio automovilístico alemán se decantó finalmente por Sagunto (Valencia) para ubicar esta fábrica.

Según la información publicada ayer por Reuters, representantes de Tata de India y Gran Bretaña participaron en las reuniones conjuntas con funcionarios de los gobiernos de España y Aragón. Además, hubo visitas a la mencionada localización situada a cerca de 30 kilómetros de la ciudad de Zaragoza. Jaguar Land Rover y el Ejecutivo autonómico también han rehusado hacer cualquier valoración sobre este proyecto a la citada agencias de noticias.

Como segundo país productor de automóviles más grande de Europa detrás de Alemania, España lanzó en 2021 un ambicioso programa para atraer inversiones relacionadas con vehículos eléctricos, el conocido como Perte (Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica), que se financia con fondos europeos. La primera convocatoria de ayudas de este plan solo asignó 793 millones de euros el año pasado de un presupuesto total de 2.975 millones de euros. Los fondos restantes se desembolsarán en una segunda fase que el Ministerio de Industria prevé lanzar en el mes de marzo, una oportunidad que podría beneficiar a nuevas empresas como Tata.

La fallida llegada Volkswagen

Hace ya tiempo que Aragón hizo una apuesta decidida por acoger una fábrica de baterías para coches eléctricos, un ambición por la que viene trabajando desde hace varios años el Ejecutivo autonómico en estrecho contacto con esta industria. De hecho, estuvo muy cerca de conseguir el objetivo con el proyecto de Volkswagen, pero el grupo alemán eligió finalmente la Comunidad Valenciana. La DGA había firmado incluso un acuerdo de intenciones con la multinacional para instalar en Zuera este megaproyecto que hubiera generado más de 3.000 puestos de trabajo y que supone la mayor inversión industrial en la historia de España. La decisión del consorcio al que pertenece Seat fue confirmada en marzo de 2022, cuando la comunidad aragonesa perdió el pulso para hacerse con uno de los proyectos a los que más empeño había dedicado en el último año.

Tata Motors ya tuvo importantes activos en Aragón, donde compró las empresas Hispano Carrocera, Lebrero y Serviplem, que acabaron cerrando

Aragón está ahora ante una nueva oportunidad. A su favor juega la situación estratégica del territorio, con Zaragoza como epicentro de los grandes fabricantes del automóvil y la disponibilidad de suelo y su bajo coste, así como el importante capital humano especializado en el mundo del automóvil y la demostrada capacidad administrativa para agilizar la implantación de grandes proyectos. Otras de las bazas son la capacidad en energías renovables y el próspero ecosistema de proveedores y suministradores del motor que están asentados en esta tierra.

Por otra parte, Aragón no es un territorio desconocido para Tata Motors, que ha contado en el pasado con importantes activos. Entre ellos destaca el fabricante de autobuses Hispano Carrocera, que lo compró en 2008 pero cinco años después acabó cerrando la fábrica. También fue propietario de Seriplem, que producía camiones horimgonera, y Lebero, que fabricaba compactadores vibrantes para carreteras.