Un año de reforma laboral: Aragón marca un récord histórico en contrataciones fijas

La reforma laboral está de aniversario y goza de buena salud en su primer año de vida. Nació como la herramienta destinada a paliar la enquistada temporalidad del mercado laboral español (el 90% de las nuevas contrataciones en Aragón en la última década tenían carácter temporal) en un pacto inédito alcanzado por el Gobierno central, las organizaciones empresariales CEOE y Cepyme y los sindicatos UGT y CCOO, en una negociación que lideró la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. La semilla de aquel diálogo social ha arraigado y el árbol del nuevo mercado laboral crece con vigor, convirtiendo en apenas un año 40.267 empleos temporales en indefinidos solo en Aragón, que marca su récord de contrataciones fijas en el primer año de reforma laboral con 143.920. En 2021 fueron 29.387.

De hecho, uno de sus frutos es la estabilidad de las nuevas relacionaes laborales firmadas, pues las contrataciones fijas en 2022 se han multiplicado por cinco en la comunidad. Con los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del cuarto trimestre en la mano, un 35% de las nuevas relaciones laborales tienen carácter indefinido frente al 9,94% de 2021, según recoge el primer balance de CCOO Aragón sobre el nuevo marco legislativo laboral, presentado ayer en la sede de la central sindical en Zaragoza. 

Cuando la norma fue aprobada en el Congreso –tras una rocambolesca sesión en el que el diputado del PP Alberto Casero erró en el voto y convalidó la reforma–, allá por febrero de 2022, los técnicos del ministerio cifraban en sus mejores previsiones que cuatro de cada diez trabajos de carácter temporal iban a pasar a ser indefinidos durante el primer año de vigencia de la ley. En Aragón supondría la transformación de 50.000 contratos, el 40% de los casi 115.000 que existen con esta modalidad al cierre de 2021. La marca no se ha alcanzado, pero supone un auténtico tijeretazo al empleo con carácter temporal, pues Aragón ha registrado la tasa de temporalidad más baja desde que el Instituto Nacional de Estadística (INE) registra este dato con un 15,17% del empleo total, nueve puntos por debajo de la marca de 2021, cuando la tasa se situaba en el 24%.

Pese al consenso en el que fue negociada, la reforma laboral llegó impregnada de algunas dudas. No fueron pocos los que vaticinaron un batacazo en cuanto a la creación de empleo por las dificultades de las empresas para asumir el impacto de los nuevos contratos en sus cuentas de resultados. La guerra de Ucrania disparó la inflación y no puso las cosas sencillas, pero los datos contradicen a los impacientes.

La contratación indefinida se dispara

Pero la realidad es que la formalización de contratos indefinidos se ha disparado en Aragón en apenas un año. Más allá de los datos de contratación, que pueden inducir a error al poder una persona tener varias relaciones laborales en vigor, los datos de afiliación de la Seguridad Social arrojan que, en enero de 2022, Aragón contaba con 460.221 asalariados cotizantes, de los que 286.631 eran indefinidos, 113.284, temporales, y 10.266, fijos discontinuos. Sin embargo, en enero de 2023 la comunidad sumaba 467.910 contratos, de los que 332.367 eran indefinidos, 62.220 temporales y 23.679 fijos discontinuos.

De este modo, la reforma laboral no ha mermado la marcha del mercado laboral, al menos por el momento. El año 2022 se cerró con 5.000 empleos más que 2021 para sumar 584.700 ocupados, según los datos de la última Encuesta de Población Activa (EPA) del cuarto trimestre. Bien es cierto que el mercado laboral, que iba como un tiro en la primera parte del año, ha sufrido un frenazo, pero la caída no se ha dado. Ni de lejos. El paro se ha reducido en 4.900 personas en Aragón para situarse en 60.700 desempleados en el cómputo global del año, pero bien es cierto que la tendencia del mercado laboral es hacia el enfriamiento. Esa misma EPA revelaba que en Aragón se habían destruido 5.000 empleos más durante el cuarto trimestre de 2022 que en el mismo periodo de 2021, cuando las cifras anuales fueron peores. 

Sin embargo, también se ha criticado que las cifras de empleo de 2022 estuvieron en cierto modo infladas por la contratación de fijos discontinuos. El PP incluso dijo que se estaban «maquillando», según su portavoz en parlamentaria, Cuca Gamarra. Es cierto que la variación entre las formalizaciones contractuales amparadas bajo esta figura se dispararon un 843% en 2022, pues en 2021 tan solo se firmaron 5.816 contratos de fijos discontinuos. Sin embargo, la contratación ha tiempo completo también se ha disparado un 116% (35.366 contratos más), así como a tiempo parcial, que se incrementa en un 235% (24.300 contratos más).

El pilar legal sobre el que se sostiene la reforma laboral liderada por la ministra Yolanda Díaz es el contrato fijo discontinuo, similar en la práctica al temporal porque supone trabajar solo cuando la producción lo requiere. Sin embargo, recoge un compromiso de contratación e incluye el derecho a indemnización en el caso de finalizar la relación laboral y cotiza a la Seguridad Social en las mismas condiciones que un trabajador indefinido. Es decir, que proporciona estabilidad en los sectores cuya producción es cíclica, como los servicios (con el esquí por bandera en Aragón) o los recolectores de fruta en el campo.

Con esta foto se puede leer que el empleo temporal se ha reducido de forma considerable en la comunidad aragonesa y así lo ha celebrado el secretario general de CCOO Aragón, Manuel Pina, quien señaló que «la valoración es muy positiva». Hemos conseguido que el mercado laboral español dejara de ser el más temporal de Europa», aseguró Pina.

Sin embargo, existen todavía claroscuros respecto a la ley. Uno de los puntos en los que ha querido incidir CCOO en la presentación del informe es en la necesidad de implementar políticas activas de empleo que reduzcan la brecha de paro en Aragón que se sitúa en los 3,78 puntos, pues la tasa femenina ronda el 11,40% y la masculina el 7,62%. «Las brechas de género siguen existiendo e incluso se han incrementado ligeramente al periodo anterior a la pandemia. La reforma laboral no es suficiente para eliminar estas brechas genera más estabilidad en la contratación de sectores feminizados como es el trabajo doméstico o la hostelería. Tenemos que articular políticas activas de empleo específicas dirigidas a combatir estas brechas», aseguró Caramelo Asensio, el secretario de Empleo de CCOO Aragón.