TRAS EL MOSTRADOR

Las relaciones con la administración: «El papeleo fácil es ciencia ficción»

Gestores y abogados advierten que los trámites se resuelven pero la espera crece

Filas en la oficina de Extranjería en la comisaría de Delicias de la Policía Nacional.

Filas en la oficina de Extranjería en la comisaría de Delicias de la Policía Nacional. / JAIME GALINDO

Sergio H. Valgañón

Sergio H. Valgañón

Muchos ciudadanos encaran el final de febrero sin saber cuándo van a poder completar todos esos trámites que llevan esperando tanto tiempo. Ante la desesperación acuden a profesionales que les ayuden en la tramitación y consigan, por fin, terminar con «el calvario» que hoy es pelearse con la Administración Pública a través de la dichosa cita previa.

Ana Rubio Morales es la vicepresidenta del Colegio Oficial de gestores de Aragón y La Rioja y tiene una «clara fotografía» de la situación que hoy existe. «Todos los días nos llaman al despacho para saber qué se puede hacer para resolver estos temas», explica Rubio Morales, que señala que las quejas de sus clientes vienen porque «es imposible que te cojan el teléfono para resolver las dudas y tampoco se puede conseguir una cita de forma telemática».

«La web hay veces que no funciona y la conclusión es que todo es un desastre», cuenta esta gestora, que desde su despacho ayuda a completar gestiones de orfandad, pensiones, bajas laborales o prestaciones de paternidad. ¿Qué provoca todo esto? «En la situación en la que estamos ahora, los trámites más sencillos se convierten en tareas de ciencia ficción».

La forma de trabajar de Rubio Morales es clara: «Sacamos el certificado digital de nuestro cliente, para que luego ellos puedan consultar el avance». Cuando este certificado se completa, la tramitación es algo que sigue el ritmo que históricamente ha tenido: «En cuanto comienza, no tardan mucho en responder y todo se resuelve en poco tiempo».

Por supuesto, hay gestiones que se resuelven antes, bien por una menor complejidad o bien porque la administración es consciente de la importancia que esa ayuda tiene para el solicitante. «Las pensiones de viudedad o las de jubilación son los trámites más rápidos», explica Rubio Morales, que ha notado en los últimos meses como aumentaba la velocidad «en la gestión de las ayudas a la paternidad y a la maternidad». «Las prestaciones no contributivas sí que tardan un poquito más, pero nada es comparable a la tardanza que hoy se vive para conseguir la cita», termina.

«Me da pena que gente que necesita estas gestiones se tenga que gastar el dinero para poder completarlas», lamenta la vicepresidenta de los gestores aragoneses, que avisa a la Administración Pública: «Está fallando la atención al contribuyente, la cita previa lo está fastidiando todo y debemos desatascarlo».

Problemas en Extranjería

Carlos Rubio Mazas es abogado penalista, especializado en trámites de Extranjería. Hace unos meses, en este diario, denunció la aparición de «unas mafias» que reservaban citas en las administraciones públicas y las revendían a personas que sí las necesitaban. «Entonces, en verano, los precios de estos trámites estaban en 70 euros. Hoy superan los 160 euros».

«No sé cómo lo hacen, pero consiguen todas las citas posibles aunque no dan ningún asesoramiento», advierte este abogado zaragozano, que se ha encontrado muchos casos que «todo se puede ir a la basura porque no llevan todos los documentos que se necesitan para conseguir los trámites». «Hay que entender que una persona sin papeles recurre al asilo para regularizar su situación», explica Rubio Mazas, que lamenta que «estas personas lleguen a plantearse pagar grandes cantidades a gente no profesional, que les estafa, porque la administración no les está resolviendo sus problemas».

Sobre el asilo, el trámite más costoso de los que suele tratar este abogado, comenta que «se debe estar rato para hacer bien las preguntas y poder resolver los casos correctamente». Un trabajo específico, que puede llevar «un par de horas», y que en el último tiempo no se está haciendo con el mimo que se merece, según Rubio Mazas, debido a la presión a la que se somete a los funcionarios: «Notas que ha bajado un poco el listón cuando hacen las preguntas o revisan la documentación, pero debemos volver a como era antes, porque no se puede meter prisa para hacer este tipo de gestiones y es un procedimiento al que hay que dedicarle todo el tiempo que sea necesario».

Suscríbete para seguir leyendo