LA REACCIÓN DE LA SOCIEDAD A LA UNIÓN DE ESTACIONES

Irene Vallejo y La Ronda de Boltaña, entre otros, se suman a la defensa de Canal Roya

La web ‘El Pirineo no se Vende’ registra 500 mensajes en dos días de funcionamiento / Varios famosos apoyan una iniciativa que da voz a una sociedad «silenciada»

La escritora Irene Vallejo.

La escritora Irene Vallejo. / ÁNGEL DE CASTRO

Sergio H. Valgañón

Sergio H. Valgañón

El Pirineo no se Vende es la última iniciativa popular que clama contra el proyecto de la unión de estaciones. En defensa de Canal Roya, casi 500 ciudadanos ya han registrado sus mensajes en una página web que se define como «transversal» y cuyo objetivo principal es dar voz a la ciudadanía, a la que consideran «silenciada» en el debate sobre el proyecto. 

 Un repaso por los centenares de testimonios que ya registra esta plataforma digital saca a la luz nombres tan relevantes en la sociedad aragonesa como la escritora Irene Vallejo, el alpinista Kilian Jornet o el grupo musical La Ronda de Boltaña, además de Los Tiriteros de Binéfar, Eugenio Monesma o el cantante de Ixo Rai! Jota. Junto a ellos, cientos de ciudadanos, muchos de ellos de los valles pirenaicos, con oficios tan diferentes como la docencia, las artes, la hostelería, la ganadería o profesiones realizadas en la montaña. 

La plataforma basa su nacimiento en la constatación de que «las diferentes administraciones y medios públicos aragoneses utilizan con frecuencia el argumento de que todo el territorio apoya el proyecto de unión de estaciones a través de Canal Roya. Sin embargo, en la calle, en nuestros pueblos y ciudades la realidad es otra».

«Comprobamos a diario en todo el territorio pirenaico, y en especial en los valles afectados por el proyecto, que esta oposición, junto con el malestar por el criterio con el que se han asignado los fondos europeos procedentes del programa Next Generation, es masiva, creciente y transversal», aseguran desde la plataforma, que certifica que la crítica a este proyecto en el Pirineo procede de «todos los sectores sociales, culturales y económicos de los valles pirenaicos». Los testimonios muestran la diversidad y transversalidad del movimiento opositor y la honda preocupación que existe en el territorio por los efectos medioambientales y económicos que el proyecto de unión tendrá en el futuro del Pirineo», completa el comunicado.

«Los testimonios reflejan el cada vez mayor sentir de todo el Pirineo: conservar el entorno, apostar por un turismo de calidad en lugar de masificar la montaña y utilizar de manera inteligente los fondos europeos para proyectos realmente sostenibles, así como mejorar los servicios básicos de las zonas rurales», resumen en comunicado los creadores de la plataforma.

Desde El Pirineo no se Vende aseguran que no dejan de recibir nuevos testimonios, de personas de toda la geografía española y del sur de Francia. A su vez, la plataforma se define como «apolítica» y no se quiere apoyar en ninguna formación, para seguir siendo «fieles» al sentir de la sociedad aragonesa: «En este espacio cabe gente de izquierdas, de derechas y de centro, pero siempre con respeto». La iniciativa no se plantea, por ahora, acudir a manifestaciones o movilizaciones como organización, aunque cree que las personas que han dado sus testimonios lo seguirán haciendo a título personal. 

Las asociaciones ecologistas viajan a Europa en busca de más apoyos

Cinco organizaciones ecologistas (Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/Birdlife y WWF) se encuentran en Bruselas hasta el próximo jueves celebrando unos encuentros con miembros de varios partidos del Parlamento Europeo. Representantes españoles y extranjeros (franceses y alemanes) atenderán a unas organizaciones cuyo objetivo es conseguir que Canal Roya entre en el organismo representativo, a través de alguna comisión. Con la comisión ambiental y con la de control de los fondos Next Gen, que sustentan el proyecto de la unión de estaciones, también están programadas reuniones. 

Estos activistas no serán los únicos aragoneses en Bruselas durante la semana. El diputado autonómico de Izquierda Unida (IU), Álvaro Sanz, hizo ayer un llamamiento a la movilización social y ciudadana para exigir la paralización del proyecto de unión de las estaciones de esquí de Astún y Formigal. IU viajará hoy a la capital belga como parte de las acciones a nivel europeo con las que seguirá intentando frenar este proyecto. Sanz lamentó «el nuevo impulso por parte del Ejecutivo aragonés a la unión de estaciones por Canal Roya aprobado ayer en Consejo de Gobierno». Además, el diputado confió en que la agenda de las organizaciones ecologistas «sirva para frenar esta atrocidad que se pretende llevar a cabo».

Suscríbete para seguir leyendo