salud mental

«Los profesionales deben atender a las diferencias de género»

David Vaquero, facultativo especialista en el área de Psiquiatría del Clínico, participa en un estudio sobre obre el trastorno del espectro del autismo a lo largo de toda la vida

David Vaquero, en el hospital universitario Lozano Blesa.  | EL PERIÓDICO

David Vaquero, en el hospital universitario Lozano Blesa. | EL PERIÓDICO / eva garcía

Eva García

Eva García

Está realizando un estudio sobre autismo en todas las edades.

Gracias a la colaboración de Atades, el IIS Aragón y el hospital Clínico de Zaragoza, desde el grupo de Psiquiatría de enlace estamos en una línea de investigación traslacional sobre el trastorno del espectro del autismo a lo largo de toda la vida. El diagnóstico del TEA resulta evidentemente clínico y por ello pretendemos explorar potenciales marcadores biológicos que sean inocuos, que no generen daño y no requieran mucho tiempo de aplicación para contribuir al conocimiento de los mecanismos patológicos que hay detrás de estas manifestaciones clínicas. El objetivo es intentar mejorar la calidad de vida de estas personas dirigiendo los esfuerzos a una medicina más personalizada.

¿Se está diagnosticando en personas adultas?

Los esfuerzos están puestos en Atención Temprana, en intentar una detección precoz de los síntomas de alarma, sobre todo en esa falta de respuesta a las voces o el rechazo en el lenguaje a nivel motor. Pero es verdad que muchas personas adultas no tienen un diagnóstico de autismo y han vivido a lo largo de su vida con estas dificultades; especialmente las mujeres.

¿Por qué?

La bibliografía científica nos dice que el infradiagnóstico que hay del TEA en mujeres, esto es que no se está haciendo una orientación diagnóstica adecuada, oscila entre un 40 y un 66% dependiendo de diferentes estudios científicos. Pero es verdad que las mujeres pueden tener más habilidades para enmascarar o camuflar las dificultades sociales que tienen en el día a día. También es cierto que tienen complicaciones para comprender las formas sociales no verbales o para establecer esos lazos de amistad más duraderos en el tiempo pero también tienen intereses que son socialmente más aceptados, que puede arrojar dificultad a la hora de detectar los síntomas nucleares del autismo.

¿Existen diferencias entre abordar el TEA en niños o en adultos?

Es verdad que el diagnóstico de autismo se debe realizar cuanto antes mejor para desplegar los servicios sociales y sanitarios oportunos para una adecuada estimulación del niño en pleno desarrollo. Eso favorece la evolución clínica y en la edad adulta, donde el diagnóstico resulta un desafío porque los síntomas pueden pasar más desapercibidos, se pueden enmascarar y atribuir a otras condiciones clínicas, psíquicas o somáticas. En la edad adulta la psicoterapia es una herramienta útil y fundamental para potenciar las habilidades sociales y favorecer la expresión emocional, que las dificultades diarias puedan ser integradas en la línea biográfica de la persona, intentando mejorar la calidad de vida. Es muy importante que en estas edades tengan una red social que sea efectiva y si no, desplegar los recursos comunitarios cuanto antes, que se sientan acompañados, escuchados, entendidos: lo que todas las personas queremos. Es verdad que en la población adulta a veces pueden concurrir otro tipo de patologías como clínica ansiosa, depresiva, problemas atencionales o de descanso nocturno, por lo que también es necesario un tratamiento psicofarmacológico, con el objetivo de disminuir este nivel de sufrimiento tan intenso.

¿Podría desembocar en patologías como ansiedad o depresión?

Exactamente, puede conllevar otra serie de patologías, no exclusivamente clínicas, que merman la calidad de vida de la persona y de su entorno psicosocial, si no se identifican y no se abordan de la forma más precisa oportuna e individualizada cada caso. Todo impacta negativamente en el resto de dominios vitales de la persona y se puede manifestar de distintas formas: rendimiento laboral inadecuado, académico, mayor deterioro de relaciones familiares y sociales y mayor nivel de malestar emocional.

Además de la edad, ¿el autismo tiene perspectiva de género?

La perspectiva de género es fundamental en todo y especialmente en el mundo del autismo. Ellas tienen síntomas muy diferentes, con una mayor conciencia social, más habilidades verbales y mayor grado de enmascaramiento, lo que arroja esa dificultad a la hora de acceder al diagnóstico. Para mí es fundamental que los profesionales de la salud mental tengan en cuenta estas diferencias de género y las posibles barreras a las que se pueden enfrentar las mujeres dentro del trastorno del espectro del autismo.

¿Cómo se aborda la investigación?

La investigación en autismo es un campo activo y en continua evolución, aunque nos queda bastante. Se conocen muchos factores a la hora de conocer la causa genética, su combinación con lo ambiental pero es verdad que todavía hay que explorar los potenciales mecanismos que están involucrados en TEA y diferenciarlos por género. Además de la heterogeneidad de este trastorno de las manifestaciones tan multiformes, hemos de conocer el por qué de la variabilidad y los distintos niveles de gravedad. Hay que individualizar y por qué una personas desarrollan una serie de comorbilidades médicas y otras no.

La sociedad está cada vez más preparada para integrar niños TEA, pero ¿para adultos?

La sociedad tiene que continuar concienciándose sobre la neurodiversidad y las particularidades de cada persona. Hay que avanzar en un entorno más comprensivo de las personas con TEA, que garantice su aceptación plena como personas. Todos los esfuerzos dirigidos a la educación, a la eliminación del estigma y la erradicación de la discriminación. Pero no me gustaría centrarme en las limitaciones sino dar una visión del autismo que reconozca sus fortalezas y sus aportaciones a la sociedad. Son personas se centran en detalles, tienen capacidad de ver aspectos de otra perspectiva, mayor creatividad, retienen información más precisa y tienen intereses específicos que conlleva un conocimiento profundo del tema, convirtiéndose en auténticos expertos.

Suscríbete para seguir leyendo

TEMAS