DÍA DEL TRABAJO

Los salarios de los aragoneses menguan a golpe de inflación

La subida pactada en 2022 fue del 2%, una cuarta parte del incremento de los precios. Las nóminas se empobrecen más en los sectores menos movilizados y con menor fuerza sindical

La pancarta principal de la manifestación de UGT y CCOO en Zaragoza por el 1 de mayor del año 2022. | X

La pancarta principal de la manifestación de UGT y CCOO en Zaragoza por el 1 de mayor del año 2022. | X / jorge heras pastor

La inflación aprieta a los bolsillos de los aragoneses, que llevan cerca de dos años viendo como mengua su poder adquisitivo mes a mes en la mayoría de los casos. La evolución de los salarios no ha ido al compás de los precios, que se han disparado de forma generalizada, con un especial impacto en bienes básicos como la electricidad y la alimentación. Aunque el encarecimiento de la vida parece haber tocado techo, las familias soportan una pesado losa, más aún para quienes han visto dispararse las cuotas de sus hipotecarias referenciadas con el euríbor por el alza de los tipos de interés. Y de ahí que los sueldos vuelven a ser el blanco de las reclamaciones sindicales en las movilizaciones del Primero de Mayo, el Día Internacional del Trabajo, una jornada que este lunes volverá a sacar a la calle a miles de personas en las manifestaciones convocadas en toda la comunidad.

Los precios se han disparando en Aragón y el conjunto de España como no se recuerda en casi cuatro décadas. El incremento del coste de la vida empezó a desenfrenarse desde el verano de 2021, pero fue a raíz de la invasión rusa sobre Ucrania cuanto la cuesta arriba se situó en unos niveles insoportables. El alza interanual del IPC (Índice de Precios al Consumo) alcanzó su punto máximo en julio de 2022 (11,4%) y desde entonces se ha ido moderando hasta llegar al 2,7% el pasado mes de marzo, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Aún así, la subida media de los precios fue del 9% el pasado año en la comunidad (8,4% en España), lo que cuadriplica el alza media pactada en los salarios por convenio en Aragón, que se sitúa en el 2,02%, según la estadística del Ministerio de Trabajo. Esto supone una pérdida descomunal de poder adquisitivo. En concreto, los sueldos de los trabajadores aragoneses se encogieron de media casi 7 puntos porcentuales, es decir, la inflación se comió el equivalente a una nómina mensual de los asalariados con 14 pagas.

Pérdida de poder adquisitivo

Pero tras estos datos se esconden realidades muy distintas dependiendo del sector en el que se trabaje, el perfil de la empresa y su tamaño. «Cerca del 50% de los convenios que vienen de los años anteriores no incluyen cláusulas de revisión. Somos el octavo país de la OCDE que más poder adquisitivo ha perdido», señaló a este diario José Juan Arceiz, secretario general de UGT Aragón, que fue elegido en el cargo hace seis días y hoy se estrenará el Primero de Mayo al frente del principal sindicato de la comunidad. Ese porcentaje llega al 75% en el caso de la industria, lo que ha permitido a los 60.000 trabajadores del Metal de Zaragoza percibir en torno a 1.700 euro por la desviación del IPC de los últimos años.

A pesar de las dificultades y la presión de los precios, lo cierto es que en el último año se han cerrado en la comunidad acuerdos importantes en sectores como el de transporte y logística, la limpieza de Zaragoza o en grandes empresas como Stellantis Figueruelas, con incrementos salariales que han empoderado a los trabajadores y les protegen de los derroteros de la inflación.

Los sindicatos tienen claro el diagnóstico en este sentido y quienes son los trabajadores más perjudicados por la escalada inflacionista. «Los que pertenecen a los sectores menos organizados y con menos sindicatos son los que más sufren en la negociación colectiva», afirmó Manuel Pina, líder de CCOO Aragón. La negociación de convenios y sus correspondientes actualizaciones salariales está atascada en pequeñas actividades como el transporte de viajeros de Zaragoza, la limpieza de edificios de Huesca o gremios como el pastelería, panadería o vino.

«Se están consiguiendo acuerdos en grandes empresas y sectores donde hay una fuerza sindical potente y tenemos muchas dificultades en los que objetivamente son más débiles», agregó. Por este motivo, UGT y CCOO urgen a la CEOE a sentarse a negociar de una vez un nuevo Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) para «desatascar» la situación de las actividades que se han visto más empobrecidas salarialmente en el actual contexto. Si la patronal no da el brazo a torcer, los sindicatos amagan «hacer confluir» los pequeños conflictos en uno más general.

Para David Lázaro, secretario general de OSTA, existen «realidades muy distintas» en el mercado laboral aragonés. Por un lado, convenios donde los salarios se están estirando de forma notable «presionados por la subida del SMI» o las buenas condiciones económicas de las empresas. Y por otro, sectores «poco movilizados o sindicalizados» donde «no hay fuerza y los convenios se retrasan, no se renuevan y cuesta más sacarlos adelante». «Hay negociaciones en las que la CEOE no quiere ni hablar del IPC», agregó.

Subida salarial del 4,34% en 2023, el doble que en 2022

Recordó que siguen sin cerrarse acuerdos en grupos como Saica o Pikolín, mientras que sí se ha logrado en el comercio textil o del calzado con «buenos» resultados. «Con nuestra presencia, los convenios sectoriales le salen más caros a la patronal», concluyó, al tiempo que señaló la huelga y la caja de resistencia del sindicato como «mejores herramientas» para la lucha de los trabajadores.

La presión sindical parece estar surtiendo efecto. En los tres primeros meses de 2023 se ha firmado en Aragón 72 convenios que atañen a 14.745 empresas y 91.125 trabajadores, con una subida media de los salario del 4,34%, el doble que el año pasado (2,02%) y la más alta de toda España. En los acuerdos de sector llega al 4,46% y en los de empresa se sitúa en el 2,82%.