"Con la salud y la comida no se juega". Este es el lema de las pitadas que todos los viernes de mayo convoca la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del CEIP Marie Curie para reclamar una comida digna en el comedor escolar. Decenas de padres, madres y alumnos del centro se han concentrado esta mañana, minutos antes del comienzo de las clases para pedir una cocina de calidad, así como tener cocina propia en el centro, tal y como reclamaban con sus pancartas.
En ellas se podía leer "La Estrella michelín se funde aquí" o "Somos el futuro, cuida nuestra dieta"; pero sobre todo, estudiantes y familia han hecho mucho ruido con sus pitos para dar a conocer sus peticiones y que el Gobierno de Aragón conozca que los padres quieren que sus hijos se alimenten de forma sana y abandonar la línea fría, contando con una cocina en el centro.

En las últimas semanas se están multiplicando las protestas en la misma dirección. Hace unos días fueron las familias del colegio Miraflores las que criticaban la "deficiente" calidad de la comida que se ofrecía en el centro; y a lo largo de este curso han sido numerosas las protestas.