El aeropuerto de Zaragoza recuperó el pasado mes de julio el tercer escalón en el podio de terminales españolas con mayor cantidad de mercancías transportadas con 8.718 toneladas, un 13,7% más que en el mismo periodo de 2022, aunque lejos todavía de los registros prepandemia (un -32% respecto a 2019), según los datos publicados ayer por el gestor aeroportuario Aena.

Ese retroceso, iniciado primero con los efectos de la pandemia y luego detectado con mayor intensidad a raíz de la invasión rusa de Ucrania, sigue plasmándose en el acumulado de los siete primeros meses del año: 63.157 toneladas, lo que supone un -14,3% respecto al mismo periodo de 2022. En ese sentido, a partir de febrero de 2022 la conexión que Inditex mantenía entre Zaragoza y Moscú se vio afectada por el conflicto armado y sigue dejándose notar en un aeropuerto cuyos dato de mercancías se refiere en exclusiva a movimientos con origen y destino internacional.

La capital aragonesa, pese a todo, se repone así del vuelco dado por el aeropuerto vitoriano de Foronda el pasado mes de junio, cuando la insfraestructura vasca superó a la aragonesa en 500 toneladas y alteró el orden mantenido durante los últimos quince años, en el que Madrid-Barajas sigue reinando con suficiencia y con cifras muy notables (52.042 toneladas en julio y 355.911 en el acumulado de los siete primeros meses del año). Le sigue a distancia y en ligero retroceso Barcelona-El Prat, con 13.454 toneladas, un -7,4% respecto a julio de 2022 y 88.027 toneladas en el acumulado, lo que de momento la hace inalcanzable para la terminal zaragozana.

Con estos datos España suma 86.779 toneladas en julio, lo que supone el mayor crecimiento porcentual en el último año (un 8,6%), concretamente desde mayo de 2022 (entonces un 9,8%). Una tendencia que se confirma en el acumulado hasta julio (594.322 toneladas), un 3,6% más que en el mismo periodo de 2022 del que tira especialmente Madrid-Barajas, que crece un 15,6% respecto a julio de 2022 y un 12,1% comparado con 2019. Ese nivel previo a la pandemia es precisamente el que no está claro que logre alcanzar todavía España en su conjunto, con un -2% de carga todavía en julio y un 1% por encima hasta este séptimo mes.

Por lo que respecta al tráfico de pasajeros, el Aeropuerto de Zaragoza, situado en el puesto 28 del total de infraestructuras aeroportuarias de Aena, recibió en julio 71.367 pasajeros, un 2,7% más que en el mismo mes de 2022 y, con 400.373 viajeros, acumula un 19% más que en lo siete primeros meses. De los de julio, 33.595 pasajeros corresponden a viajeros nacionales, un 7,5% más respecto a julio pasado, y los internacionales, 37.665, un 1,4% menos. En lo alto de la tabla siguen dominando el Adolfo Suárez-Madrid-Barajas, con 5,5 millones de pasajeros, Barcelona, con 4,9 millones, Palma de Mallorca, que registra 4,3 millones de viajeros y Málaga-Costa del Sol, con 2,4 millones. Precisamente, el aeropuerto malagueño protagoniza una de las mayores subidas respecto a julio de 2022 (17,8%). En ese apartado de crecimiento destacan todavía aún más Girona-Costa Brava (33,8%), A Coruña (32,1%) y Bilbao y Valencia, que crecen un 17%. Como anécdota, en el último lugar se mantiene Huesca-Pirineos, que en julio vio pasar por sus instalaciones a 23 pasajeros.

En cuanto al número de operaciones, Zaragoza sumó 918 aterrizajes y despegues, un 3,8% menos que en el mismo mes del año pasado. En los siete primeros meses de 2023, el aeropuerto zaragozano registró 400.373 pasajeros, un 19,1% más que en el mismo periodo de 2022. Hasta julio se contabilizaron 5.531 movimientos de aeronaves, un 5,4% menos que en el mismo periodo de 2022.