Septiembre apunta buenas maneras para los hoteles de Zaragoza, el broche de oro para un verano que ha sido positivo para estos negocios. La agenda de eventos para este mes está animada, sobre todo, por la celebración de la segunda edición del festival Vive Latino el próximo fin de semana, con la expectativa de alcanzar un 90% de ocupación. La reservas cerradas a día de hoy rozan el 80%, una cifra similar a la del año pasado, pero el sector considera que hay tiempo para mejorar esa cifra y acercarse al lleno con las contrataciones de última hora.

Así lo ha asegurado este lunes Antonio Presencio, presidente de la Asociación de Hoteles de Zaragoza y provincia (Horeca), que ha atendido a los medios de comunicación para hacer balance del verano. Lo ocupación estimada para el viernes es actualmente del 75% y para el sábado, del 80%. Pero el dato que más llama la atención es que el 40% de las reservas son de turistas extranjeros, lo que da una idea de la proyección internacional de un evento que el sector hotelero confían en que se consolide en los próximos años dado el efecto arrastre que tiene para el turismo y la hostelería de la ciudad. Buena parte de estos viajeros proceden además de Latinoamérica.

Respecto al mes de agosto, los establecimientos de la ciudad alcanzaron una ocupación del 62%, por debajo del 71% registrado en el mismo mes del año, en el que hubo un rebote de la demanda por la vuelta a la normalidad del sector tras dos largos años condicionados por la pandemia. La cifra es mejor, sin embargo, al 52% anotado en 2019, el ejercicio previo al estallido de la crisis del coronavirus, lo que refleja una progresión del sector en los últimos años.

El turismo rural se diluye tras la pandemia

En el conjunto de la provincia, se repite el mismo patrón. La ocupación llegó al 69% en el octavo mes del año, un nivel inferior al de 2022 (84%) pero mejor que el de 2019 (64%). "Son buenos datos pero hay indicadores que reflejan una cierta ralentización respecto al efecto del verano del año pasado", afirmó Antonio Presencio.

La estancia media en la capital aragonesa se ha situado en 1,80 días, por debajo también del dato de agosto de 2022 (2,06 días) y también de 2019. En la provincia ha sido del 1,71 días, casi un día menos que el verano anterior (2,63), lo que revela que el furor por el turismo rural que se produjo a raíz de la pandemia "se ha diluido", según apuntan desde Horeca.

Las previsiones para septiembre son muy positivas. Los hoteles de la ciudad tiene ahora misma un 62% de reservas, dos puntos más que hace un año (60%) y muy por encima de la cifra de 2019 (54%). En la provincia, el nivel es del 53%, en este caso peor que en 2022 (71%), pero mucho mejor que en 2019 (50%).

Las sensaciones de las empresas hoteleras son muy favorables. "Todavía hay mucho margen porque la agenda está animada", destacó, en alusión a la llegada de la Vuelta a España a Zaragoza el próximo jueves y el mencionado Vive Latino este fin de semana, además de la celebración de algún acto de la Unión Europea (UE). La estancia media prevista es de 1,43 frente al 2,38 del año anterior.

El turismo asiático y el ascenso del Real Zaragoza

Aunque se mostró «optimista» y confió en que el último cuatrimestre de 2023 confirme la recuperación del sector hotelero, Presencio cree que «hay que analizar algunos factores como la inflación al afectar al consumo».

Para mejora la situación del sector, abogó también por trabajar en una «agenda» que «motive» al turista y «mejore la proyección de la imagen de la ciudad». También puso el foco en la atracción de viajeros internacionales, un turista que «ayuda a tener mejor previsión» y a «desestacionalizar las reservas».

En este sentido, confirmó que el turista asiático «está volviendo con peticiones y reservas para finales y comienzo de año», al tiempo que deseó el regreso del Real Zaragoza a Primera División, porque ayudaría a impulsar esta actividad.