Hermino Rufino Sancho Íñiguez ha sido el protagonista involuntario del debate de la investidura fallida del candidato del PP, Alberto Núñez Feijóo.

El diputado del PSOE por Teruel es también alcalde de su pueblo, Mezquita de Jarque, y uno de los políticos turolenses que más tiempo lleva en activo. Nadie duda en Aragón de su apoyo a los postulados de Pedro Sánchez.

De hecho, es uno de los nombres que Ferraz reclamó que estuviera de número uno al Congreso, aunque la propuesta que intentaba plantear la federación turolense era que liderara la lista el exalcalde de Alcañiz, Ignacio Urquizu, crítico con Pedro Sánchez en la crisis de 2016. Antes de que se tuvieran que rehacer las listas, la federación turolense asumió que Herminio Sancho lideraría la lista al Congreso por Teruel.

Sancho es alcalde de su pueblo desde 2007. Un municipio de la comarca Cuencas Mineras con apenas 130 habitantes en el que peleó porque el despliegue de las eléctricas dejara beneficios en la localidad. Después de un lustro de litigios, en 2017, el Tribunal Supremo falló a favor del Ayuntamiento de Mezquita de Jarque, que reclamaba a Red Eléctrica de España el pago de un canon por el uso del suelo público con su línea de Alta Tensión que conecta Mezquita con Morella.

Agricultor y ganadero de profesión, en su declaración de bienes en el Congreso figura un tractor, y 600 ovejas menos que en la legislatura anterior.

Ahora, su labor política se divide ahora entre el Congreso, donde es diputado desde 2019, y el Ayuntamiento de Mezquita de Jarque, aunque en pasadas legislaturas ha sido consejero comarcal, diputado en las Cortes de Aragón en el primer mandato de Javier Lambán, entre 2015 y 2019, secretario general del sindicato agrario UAGA Teruel y presidente de la Cooperativa Cotega y Oviaragón.

El diputado turolense ha sido el protagonista involuntario de la sesión de investidura por una confusión en el momento de su voto a Feijóo, una anécdota que copa portadas y comentarios en todos los medios nacionales y las redes sociales. Él mismo ha aclarado a la salida del hemiciclo qué ha sucedido en el momento de la votación, y ha reiterado su lealtad a Pedro Sánchez, ante las dudas de quienes se preguntaban si el error había sido forzado voluntario.

Inicialmente, se ha escuchado que Herminio Sancho votaba "sí" a la investidura, cuando lo previsto era su voto contrario, al formar parte del grupo parlamentario socialista. Inmediatamente, Herminio Sancho ha aclarado desde la tribuna que había que rectificar su apellido, pues la secretaria de la Mesa del Congreso lo había leído mal.

"Sancho sí, es mi apellido, Sánchez, no", ha explicado el parlamentario turolense, que ha aclarado inmediatamente que su voto era "no" a la investidura de Alberto Núñez Feijóo.

Entendido el error por parte de la Mesa, de forma inmediata se ha repetido su votación, repitiendo el derecho a voto con su nombre correcto: Herminio Rufino Sancho Íñiguez. Entonces, el parlamentario turolense ha dicho alto y claro el sentido de su voto: "no" a la investidura del candidato del PP.