Los abogados y los procuradores del Turno de Oficio de Aragón protagonizaron ayer la primera jornada de paros por la huelga indefinida convocada para mejorar la retribución de sus honorarios. Desde el sindicato Venia lamentaron que sus compañeros iniciaron «con mucho miedo» las protestas porque desde el Consejo General de la Abogacía suscribieron un comunicado a nivel nacional en el que advertían de la posibilidad de adoptar medidas «disciplinarias» contra los colegiados porque alegaban que no tenían «derecho a la huelga». Así lo explicó ayer a este diario la delegada sindical de Venia en Aragón, Bella Sánchez, quien cifró el seguimiento de los paros en un 15%.
Más allá de la actividad judicial de la capital aragonesa, Sánchez recalcó que los paros en los juzgados de Monzón tuvieron «muchísimo seguimiento» y, en el resto de comunidades, se llegaron a suspender procedimientos en los órganos provinciales. El balance fue «satisfactorio», argumentó Bella, porque la mayor parte de sus compañeros tenían «mucho miedo a que los sancionen». Nuevamente, volvió a ahondar en la importancia del dossier de reivindicaciones que desde Venia hicieron llegar a las instituciones aragonesas. Recoge, en primer lugar, la redacción de «una norma legal independiente» para garantizar el derecho de todos los miembros del Turno de Oficio.
A nivel de remuneración y dotación presupuestaria, el sindicato recalca la importancia de actualizar los baremos de las actuaciones –a día de hoy, cobran 40 euros por un anuncio de casación ante el Tribunal Supremo y 50 por la presentación de demandas de medidas de custodia para el régimen de alimentos–, congelados a pesar de la subida del IPC. Entre sus reivindicaciones de tramitación, gestión y logística, incluyen la implementación de asistencia telemática para asistir a los detenidos de pueblos pertenecientes a los diferentes partidos judiciales de la comunidad.