La nueva hoja de ruta de una actividad estratégica

Aragón prevé captar casi 14.000 millones de inversiones energéticas hasta 2030 y duplicar las renovables

El plan autonómico del sector para el periodo 2024-2030 estima que se crearán 25.000 empleos, la mayoría de corta duración, y que se acelerará el despliegue eólico y fotovoltaico

Decenas de aerogeneradores en el termino de La Muela, un municipio pionero en la instalación de la energía eólica en Aragón.

Decenas de aerogeneradores en el termino de La Muela, un municipio pionero en la instalación de la energía eólica en Aragón. / Angel de Castro

Aragón se encuentra en una posición privilegiada para seguir liderando la transición energética en España, donde ya es un actor protagonista. La inversión total del sector en la comunidad ascenderá a 13.954 millones de euros en siete años, de los que la mitad se destinará al desarrollo de nueva capacidad de generación renovable (el 52,6%). El despliegue de instalaciones eólicas y fotovoltaicas va a acelerarse más si cabe, hasta duplicar la potencia actual hasta los 15,6 gigavatios (GW). El impacto económico de estas cifras se traducirá en la creación de unos 25.000 puestos de trabajo, la mayor parte de ellos de corta duración al concentrarse en las fases de construcción de infraestructuras.

Así lo recoge el borrador del Plan Energético de Aragón 2024-2030 elaborado por el Ejecutivo autonómico, un documento que se encuentra inmerso en el proceso participativo para culminar su aprobación. Se trata de una hoja de ruta a medio y largo plazo para responder de «manera fiable y sólida» a las necesidades y oportunidades del sector, con el objetivo de descarbonizar la economía regional en dicho periodo.

Tras las renovables, donde se estiman inversiones por valor de 7.338 millones en el citado periodo, la segunda categoría donde se esperan movilizar más fondos son las medidas de eficiencia en edificios e industria, con 3.208 millones, el 23% del total. La extensión y mejora de redes de transporte y distribución, principalmente eléctricas, atraerá otros 1.991 millones (14,3%), mientras que en la electrificación se desembolsarán 1.327 millones (9,5%).

La fuerza del viento y el sol

El informe constata que Aragón tiene una posición privilegiada para contribuir a los objetivos de descarbonización nacionales y europeos y generar una economía más verde y sostenible. Esta relevancia se debe principalmente a la combinación de dos recursos naturales, el viento y el sol, con los que lidera el desarrollo de energías renovables en España, algo que va a continuar con un despliegue todavía más acelerado.

El plan estima un crecimiento de la capacidad eólica del 54% en siete años, de los 5.255 MW que había al cierre de 2023 hasta los 8.251 para 2030. En el caso de la fotovoltaica el incremento es todavía mayor, del 90%, de 2.473 a 7.330 MW. En total, se prevé la instalación de casi 4.500 megas en nuevos molinos de viento y 6.600 MW en placas solares, según las estimaciones realizadas atendiendo al histórico de acceso y conexión de la Red Eléctrica de España, la planificación de la red de transporte para el periodo 2021-2026 y las solicitudes de acceso pendientes de la declaración de impacto ambiental.

Las renovables movilizarán 7.338 millones y otros 3.208 las medidas de eficiencia energética

Con estas implantaciones, la potencia total instalada en Aragón se prevé que llegue a 22,4 GW (22.457 MW) en 2030, el doble de la actual, que se sitúa en 11,7 GW. A este ascenso también contribuiría el hidrógeno verde, que se espera que alcance una capacidad de 880 megavatios en siete año; los sistema de almacenamiento con baterías, que rondarán los 100 MW;el bombeo hidroeléctrico, que se multiplicará por cinco (de 88,85 a 445 MW).

Para alcanzar los ambiciosos objetivos de energía renovable, además de la ejecución de nuevas instalaciones, se está recurriendo a proyectos de hibridación de tecnologías verdes, que permiten maximizar la eficiencia y el aprovechamiento de la infraestructura existente, junto con la incorporación de sistemas de almacenamiento. El plan de repotenciación de parques eólicos y solares permitirá extender la vida útil de los mismos y aumentar su capacidad de generación.

Además de proyectos que combinan energía solar y eólica, en la comunidad también se están realizando hibridaciones con centrales de ciclos combinados que antes no participaban en el mercado.

Electrointensivos

Otro aspecto destacado del contexto aragonés es la atracción de grandes consumidores de energía electrointensiva, así como la electrificación de las industrias existentes, aprovechando la abundancia de recursos renovables, según remarca el plan de la DGA. Sectores como los centros de datos y ciertas industrias con alta demanda energética están encontrando en la comunidad un entorno propicio, donde el acceso a energía limpia y a costes competitivos es posible.

La llegada de estos consumidores no solo incentivará el despliegue de nuevas instalaciones de generación renovable, sino que también contribuirá a optimizar el uso de la red y reducir al mínimo las congestiones y promoviendo el equilibrio entre demanda y oferta de energía. La atracción de inversión asociada a los grandes consumidores impulsa el desarrollo económico y la creación de oportunidades en el territorio, consolidando a Aragón como «un polo de atracción de industrias sostenibles», según subraya el documento.

La eficiencia energética es otro de los grandes retos que marca el plan, que utiliza la intensidad energética como parámetro para evaluar el desempeño en este campo, un indicador que mide la cantidad de energía necesaria para generar una unidad de producto económico. En concreto, el objetivo es reducir un 13,4% esta variable en relación a 2023, ya que se espera que el PIBcrezca un 40,1% en este ciclo pero que el consumo energético final lo haga a un ritmo del 21,3%. 

El plan energético, el cuarto que se impulsa en la comunidad autónoma, examina las particularidades del territorio aragonés, así como los cambios demográficos y económicos en el tejido industrial que han ocurrido en los últimos años. Además, propone una serie de medidas que se consideran alcanzables en el contexto actual de la comunidad, orientadas a la reducción de emisiones y al impulso de la eficiencia y la resiliencia energética. Entre sus principales líneas de acción se encuentran la promoción de renovables, el fortalecimiento de las redes energéticas, la integración de tecnología innovadora y el fomento de una movilidad sostenible.

Aragón ha logrado consolidarse como uno de los líderes en el sector energético español gracias a su destacada capacidad de generación eléctrica y su apuesta por las energías renovables. A ello se suma una infraestructura clave en almacenamiento subterráneo de gas natural –Serrablo, en Huesca–, que representa el 25% de la capacidad nacional.

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