La Aljafería 'se blinda' a las protestas del campo aragonés

Las Cortes de Aragón suspenden las visitas turísticas al palacio y solicitan refuerzos policiales ante la nueva manifestación de los agricultores, con las imágenes en la retina del ‘asalto’ de hace un año

Un tractor sobre el puente del foso de la Aljafería, el año pasado.

Un tractor sobre el puente del foso de la Aljafería, el año pasado. / JAIME GALINDO

Zaragoza

El Palacio de la Aljafería se blinda hoy ante la previsión de que se repitan las protestas de los agricultores que, hace un año, cercaron la sede de las Cortes de Aragón e incluso llegaron a intentar cruzar el foso con un tractor, comprometiendo la seguridad en el edificio y de los políticos que celebraban en ese momento una sesión plenaria. Según ha podido confirmar este diario, las Cortes han pedido reforzar la seguridad con una mayor presencia policial y se han cancelado las visitas turísticas al Palacio de la Aljafería para evitar problemas mayores. A la elevada presencia de visitantes se suma, desde el mes de diciembre, el atractivo de la exposición sobre Goya que ha aumentado la llegada de turistas. Con esta medida de cierre de puertas se pretende evitar que las protestas afecten a los visitantes. 

Los trabajadores de la casa, personal asociado a las formaciones políticas y los propios representantes políticos recibieron ayer una comunicación en la que se advertía de este dispositivo especial. La principal medida es la prevención que se le solicita a las personas que asistan a la sesión plenaria, desde las 8.00 hasta las 16.00 horas. El pleno de hoy tiene como principal aliciente la toma en consideración de la futura Ley de Vivienda de Aragón y la comparecencia de los consejeros Manuel Blasco, por el balance turístico de 2024, y Carmen Susín, por las políticas para reducir la pobreza en la comunidad. 

La comunicación interna a los miembros de La Aljafería recomienda que se eviten los desplazamientos fuera del palacio durante la mañana, animando a que el movimiento se limite al interior del edificio y que las pausas se tomen en la propia cafetería de la sede de las Cortes autonómicas. El refuerzo de la seguridad se centrará, en especial, en el acceso al palacio para que se desarrolle con total normalidad la primera de las dos sesiones plenarias de esta semana. 

La prohibición de que los turistas puedan acceder a La Aljafería durante la jornada también afecta a las personas ajenas a la vida parlamentaria que quieran seguir desde la tribuna el pleno, ya que no podrán hacerlo por estar también cerrada esa posibilidad. Incluso la vida del servicio de comidas se verá alterada: el restaurante de La Aljafería no podrá recibir comidas durante el día.

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