La ruta fácil de senderismo hasta un lago glaciar del Pirineo aragonés: es ideal para hacer en familia

Con la llegada de la primavera, el día alarga y el buen tiempo invita a calzarse las botas. Aragón es un paraíso para los amantes del senderismo y el Pirineo, con su amplia variedad de rutas, ofrece un destino perfecto tanto para los montañeros más experimentados como para quienes buscan paseos tranquilos en familia.

Es el caso de esta ruta que hoy presentamos y que te permitirá conocer una de las joyas del Pirineo aragonés: el Ibón de Piedrafita. Este es uno de los lagos glaciares más bonitos y accesibles de toda la comunidad. Situado en el valle de Tena, en la provincia de Huesca, el itinerario es muy sencillo: de unos 6 kilómetros, que podrás realizar en unas 2 horas, con un desnivel de 240 metros.

Cómo llegar

El punto de partida de esta ruta es Piedrafita de Jaca, uno de los pueblos con más encanto del Pirineo. Desde allí, sigue las indicaciones hacia el Parque Faunístico de Lacuniacha. Junto al acceso al parque hay un aparcamiento gratuito donde puedes dejar el coche.

Desde el parking comienza la senda forestal, bien señalizada. Pronto verás al fondo la imponente Peña Telera. A los 2 kilómetros encontrarás el barranco del Boj y un desvío hacia el ibón. A partir de aquí, el camino se vuelve más montañoso, pero también más entretenido.

La ruta continúa en dirección a Peña Terrosa y al Arco. Cruzarás praderas y, tras un último tramo, llegarás al Ibón de Piedrafita. El lago se encuentra a los pies de Peña Telera, que se alza imponente a 2.760 metros de altitud, mil metros por encima del agua. El paisaje es simplemente espectacular.

La ruta senderista que lleva a una de las joyas naturales de Aragón: aguas cristalinas emanan de sus dos ojos

Regreso

Para regresar hay dos opciones: volver por el mismo camino de ida o realizar una ruta circular que alarga un poco más el itinerario, pero que es también apta para toda la familia. Solo tienes que bordear el ibón por su lado izquierdo (mirando hacia Peña Telera) para enlazar con el sendero de vuelta.

La primavera y el otoño son los mejores momentos del año para hacer esta ruta, que también puede recorrerse en bicicleta. Para los más intrépidos, la ruta puede realizarse en invierno con raquetas o esquís de fondo. También es factible hacerla en verano, ya que ofrece numerosas zonas de sombra.

¿Qué ver en Piedrafita de Jaca?

Puedes completa la visita al ibón de Piedrafita, perdiéndote por las calles de esta bella localidad pirenaica, con otros lugares interesantes que merecen una visita. Uno de ellos es sin duda el laberinto de cipreses de unos 5.000 metros cuadrados de extensión junto al mágico bosque del Betato, que conecta Piedrafita con Tramacastilla de Tena. El laberinto está abierto de junio a noviembre, y tiene un coste de unos 7 euros para los adultos.

Además, las familias tienen una cita imprescindible en el Parque Faunístico de Lacuniacha, un bioparque que alberga especies autóctonas en semilibertad, como osos, ciervos o sarrios. Durante el recorrido de 4 kilómetros se puede disfrutar de una ruta fácil de senderismo de montaña, donde se pueden observar alrededor de 120 ejemplares, de las 15 especies diferentes que viven en Lacuniacha, y dos ecosistemas típicos del Pirineo.