Los antiguos juzgados del Pilar tienen aún 7.000 metros cuadrados sin utilizar

El Gobierno de Aragón anunció el pasado miércoles la creación del futuro Centro Goya en los antiguos juzgados de la plaza del Pilar, en el ala oeste del edificio con más de 60 años de historia que lleva en desuso desde que se trasladaron todos los juzgados a la Ciudad de la Justicia en el recinto Expo.

Un nuevo equipamiento cultural que sin embargo no va a servir todavía para llenar definitivamente un edificio que dejó de tener actividad en su interior en 2013 y que sigue teniendo miles de metros cuadrados en desuso. Concretamente son más de 7.000 los que todavía no tienen inquilino, aunque sí dueño, el Departamento de Bienestar Social y Familia de la DGA que pronto podría ocupar un espacio importante del que queda libre.

Según explicaron a este diario desde la consejería que dirige Carmen Susín, los técnicos están estudiando la posibilidad de trasladar allí las oficinas de la Subdirección de Protección a la Infancia y Tutela del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS), que actualmente se encuentra en las instalaciones de la calle Mariando Supervía, en el distrito Universidad y muy cerca del río Huerva, y a los 90 trabajadores que ahora trabajan en este edificio.

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Su traslado no solo serviría para cubrir este vacío que lleva más de una década en el olvido de la administración en la plaza del Pilar de Zaragoza, y que representa más del 60% de los 10.000 metros cuadrados que tiene el antiguo edificio de los juzgados que diseñó Regino Borobio, y que se estrenaron en los años 60 del siglo pasado con los juzgados. Su instalación sería la integración definitiva de todos los servicios que dependen de Bienestar Social en la capital aragonesa. Un reagrupamiento de sedes administrativas que comenzó ya en 2019 con la llegada de unos 150 trabajadores del servicio provincial del IASS y que ha ido creciendo progresivamente en los últimos cinco años y medio.

La gerencia del IASS ya dejó sus instalaciones del Paseo de Rosales y las oficinas del Departamento de Bienestar Social y Familia abandonaron las que ocupaban antes en el número 16 del paseo María Agustín y en Vía Univérsitas. En pocos meses se produjo un desembarco en el edificio de la plaza del Pilar que comenzó en la parte más nueva de los antiguos juzgados, los bloques que se construyeron con las ampliaciones ejecutadas en los años 80 y 90 con el crecimeinto de la actividad judicial en este céntrico enclave de Zaragoza.

Además, se da la curiosa circunstancia que el despacho de la consejera, entonces de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, se tuvo que aplazar cuando ya habían aterrizado en el edificio muchos de los servicios dependientes del IASS y la consejería, entre diciembre de 2019 y principios de 2020. Por una razón evidente: la pandemia del coronavirus que paralizó los movimientos previstos para el segundo trimestre de ese año. Ahora ya está operativo todo el departamento de Carmen Susín en la plaza del Pilar.

Se eligió estos edificios, formados por el gran zócalo en planta baja que sirve de vestíbulo principal y que aglutina la mayoría de los espacios dedicados a la atención al usuario y otros tres edificios unidos entre sí. Entre todos suman, aseguran los técnicos del departamento, más de 10.000 metros cuadrados.

Y se aplicó una reforma mínima de acondicionamiento para reconvertirlo al nuevo uso con cambios mínimos en su interior y una inversión global que rondó los 6 millones de euros. Aunque aún hoy se pueden encontrar vestigios de lo que fue, especialmente en los dos sótanos que servían de aparcamientos y donde estaban, y aún están, algunos de los calabozos que siguen intactos y sin utilizar. 

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