Los lazos comerciales entre Aragón y Cataluña superan los 18.000 millones

Aragón es una de las economías regionales más integradas en los mercados nacional e internacional. La comunidad autónoma registró un grado de apertura externa del 171% de su producto interior bruto (PIB) en 2022, superando ampliamente la media española. Este indicador refleja la importancia del comercio tanto con el resto de España como con el extranjero en la estructura productiva aragonesa, un nivel solo explicable por su integración en las cadenas de suministro nacionales. 

Así lo ponen de manifiesto las últimas cifras del C-Intereg, un proyecto impulsado por el Centro de Predicción Económica (Ceprede) con el objetivo de analizar y proporcionar datos detallados sobre el comercio interregional e internacional de bienes y servicios entre las comunidades autónomas. De ello se hace eco el último Boletín Trimestral de Coyuntura publicado por el Gobierno de Aragón, que muestra una radiografía de la situación. 

Los intercambios comerciales de Aragón se dividen casi a partes iguales entre el ámbito internacional y el nacional. Las ventas al resto de España sumaron 20.119,5 millones (el 46,3% del PIB) en 2022 (últimos datos disponibles), mientras que las exportaciones de la comunidad al resto del mundo alcanzaron los 16.316,8 millones en ese mismo año (el 37,6% del PIB). 

La comunidad muestra así una mayor dependencia del mercado interior, una tendencia que se ha agrandado en los últimos años. Las exportaciones internacionales de Aragón han crecido un 37% en cinco años, con 4.400 millones más entre 2018 y 2022; pero más lo han hacho las ventas al resto de España, con un incremento del 55,2% (7.163 millones más).

Vinculación recíproca

Cataluña volvió a erigirse como el principal cliente y proveedor de Aragón, un flujo de intercambio de bienes y servicios que suma 18.269 millones. La vecina región oriental concentra el 38,2% de las ventas de la comunidad en el resto de España, un volumen económico que alcanza los 7.684 millones. Es su principal mercado exterior incluyendo también las ventas internacionales, con una cifra de negocio que duplica la registrada con Francia (3.032,1 millones), Alemania (2.332,6) o Italia (1.391,5), los destinos a los que más exporta.

El peso de Cataluña es mayor si cabe en cuanto a las compras que realizan las empresas aragonesas en el resto de España. Aglutina el 46,5% de esas transacciones, con una facturación de 10.585 millones.

El condicionamiento económico entre ambos territorios es recíproco. Las cifras ponen de relieve que Aragón es también un socio esencial de Cataluña al ser su segundo mayor mercado exterior, ya sea por ventas intrarregionales o internacionales. Tradicionalmente ha sido el primero, una posición que ocupa Francia con los datos de 2022, con un importe de 16.786,2 millones.

Valencia y Navarra

En cualquier caso, las ventas catalanas a Aragón (10.585 millones) son superiores a las que realiza a Alemania (9.459,0 millones), Italia (8.830,6), Portugal (5.989,8) o Reino Unido (4.041,8), sus principales clientes comerciales en el mundo.

El podio del comercio interregional de Aragón se completa con la Comunidad Valenciana y Navarra. Esta última destaca como segundo proveedor, con el 12,7% del total de importaciones intraespañolas, seguida de Madrid (8,4%). La región levantina, por su parte, es su segundo mayor cliente dentro de España, con el 17,1% de las ventas, y el cuarto al que más importa, con el 8% de las compras.

La proximidad geográfica es un factor determinante. Siete comunidades limítrofes o cercanas (Cataluña, Comunidad Valenciana, País Vasco, Castilla-La Mancha, Madrid, Navarra y Castilla y León) absorbieron el 90,9% de las ventas aragonesas en 2022 y representaron el 85,1% de sus compras.  

En cuanto a la composición sectorial, en las exportaciones interregionales de la comunidad destacan los bienes de equipo, que lideraron las ventas (el 28% del total), seguidos por los bienes de consumo (el 21,3%). En importaciones interiores, la energía fue la principal partida (el 25,6%), seguida de cerca por los bienes de equipo (24,5%). Este patrón refleja la especialización industrial aragonesa y su dependencia de insumos energéticos e industriales, muchos de ellos procedentes de comunidades vecinas.

Por otra parte, las compras de Aragón procedentes del resto de España fueron de 22.743,4 millones en 2022, una cifra que supera ampliamente a lo que importó del resto del mundo (15.142,1 millones). Como resultado, el saldo comercial de la comunidad en el mercado interior continuó con su habitual signo negativo, un déficit que se sitúa en 2.624 millones.

Con todo, Aragón consolida su papel como nudo logístico y productivo en el nordeste peninsular, una economía que depende en gran medida de sus conexiones con Cataluña y el corredor mediterráneo.