El pueblo con peor vista de España está en Aragón: tiene menos de 40 habitantes

Aragón está salpicada por numerosas localidades que son un remanso de paz y un destino ideal para perderse y desconectar de la rutina diaria. Para llegar a algunas de ellas, es necesario desviarse de las grandes vías de comunicación y adentrarse en lugares poco conocidos, donde el tiempo se detiene y la tranquilidad se adueña del entorno.

Algunas de estas localidades llaman la atención de quienes se aproximan a ellas por sus curiosos nombres, raros, exóticos o directamente engañosos, ya que muchas veces llevan a equívoco y dicen algo que no son. El ejemplo más claro en nuestro país es el de Santillana del Mar (Cantabria), que ni es santa ni llana ni tiene mar. No obstante, en la toponimia local aragonesa existen también infinidad de ejemplos.

Es el caso de este pequeño pueblo de Aragón, en la Comarca de La Jacetania, provincia de Huesca, con la peor vista de toda España. Sí, sí, con la peor vista, tanto que no te deja ni mirar. Y es que esta bella localidad situada en el Pirineo Occidental no es otra que Novés.

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Lo contrario de lo que su nombre indica

Pese a lo que su nombre indica, Novés no tiene "malas vistas" sino todo lo contrario. La localidad disfruta de una panorámica impresionante, con la Peña Oroel y la Sierra de San Juan de la Peña al fondo. El atractivo de este paisaje de media montaña se ve reforzado por la magia que irradia el famoso monasterio de San Juan de la Peña, cuna del Reino de Aragón. Una verdadera joya del románico aragonés.

La localidad está situada en la margen derecha del río Lubierre, a los pies de la carretera que la une con Jaca y a 826 metros de altura, rodeada de los campos de cereales que son la principal fuente de riqueza de la población junto con la ganadería ovina. Novés forma parte del municipio de Jaca tras su incorporación al mismo después de pertenecer a Caniás. Según los datos del INE, en 2023 contaba con 35 habitantes.

Arquitectura popular y tradiciones

Entre los atractivos de Novés destaca la iglesia de San Pedro Apostol, del siglo XVII, con un retablo barroco. Un paseo arbolado da entrada a la población, que se compone de unas pocas calles que se extienden hacia un escarpe donde se ubican la iglesia parroquial y los restos de una antigua fortificación integrada en Casa Zagal.

La localidad mantiene intacta su arquitectura popular, donde abundan las casas de piedra, los tejados de losas y las chimeneas troncocónicas. Quedan elementos singulares como varios arcos en piedra que dan entrada a calles y callejones, como el de Casa Saluzo. También pueden verse algunas bordas, pajares y pozos, el viejo horno, las antiguas cárceles y las escuelas, hoy en día utilizadas como Centro Social. En los últimos años se ha rehabilitado la herrería que ha recuperado su uso original gracias a unos artesanos locales.

Novés celebra sus fiestas mayores el 8 de septiembre en honor a la Natividad de la Virgen, y las menores, el 17 de enero, por San Antonio Abad. Además, el pueblo participa en la tradicional romería de San Indalecio en San Juan de la Peña, que se celebra un domingo de la primera quincena de junio.