Una noche de guardia entre cucarachas para los médicos del Royo Villanova de Zaragoza

Una desagradable noche del sábado al domingo pasaron algunos médicos del Hospital Royo Villanova, en Zaragoza, cuando se percataron de que unos inesperados inquilinos se habían colado en el dormitorio donde descansan en las guardias. Los nueve facultativos que trabajaban en el servicio de Urgencias han dormido junto a cucarachas que se han colado en la sala de estar que se sitúa en el sótano del edificio, a ras de calle.

Fuentes de la plantilla que ha trabajado durante el turno indican que es habitual que entren algunos mosquitos, sobre todo con la llegada de los meses de verano, pero las cucarachas son una cosa distinta, "más grave", a juicio de los facultativos que se han puesto en contacto con este diario. Las ventanas del área de descanso dan al parque junto al Royo, algo que puede explicar la presencia de los insectos, pero las citadas fuentes refieren que también se han encontrado cucarachas en el baño del personal de urgencias de la primera planta, por lo que piden una rápida desinfección de la zona.

Desde el Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón, indican que el hospital, además del servicio de limpieza, tiene contratada a una empresa de desinfección para control de plagas y fumigaciones. "Se va a inspeccionar especialmente ese área y reforzar las actuaciones que sean precisas", indican desde la consejería que dirige José Luis Bancalero.

En el Royo Villanova se atienden al año más de 52.000 urgencias y se realizan más de 8.000 cirugías y cerca de 1.600 ingresos. Es uno de los hospitales de referencia de la capital aragonesa y ahora tiene pendiente la aplicación de un plan funcional que modernice las instalaciones, una actuación impulsada por el área de Sanidad. El centro cuenta con 254 camas y siete quirófanos.

Casos como el de las cucarachas no se habían registrado en los últimos años en Aragón. El más reciente se dio en el área de descanso del servicio de urgencias del Hospital Regional de Málaga, donde los sindicatos denunciaron la presencia de insectos, como moscas, mosquitos, arañas, chinches y cucarachas, además de ratones y ratas, así como condiciones insalubres para los 28 facultativos que pasaban ratos de sus guardias de 24 horas en el espacio.