Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Esta es la parcela que gana enteros para acoger el futuro hospital Royo Villanova: próxima a la A-23 y con fácil acceso en tranvía

La consejería de Sanidad ha estudiado otras opciones como el terreno cercano a la rotonda de la MAZ, ya descartado

A la derecha, los terrenos con opciones de albergar en el futuro hospital Royo Villanova.

A la derecha, los terrenos con opciones de albergar en el futuro hospital Royo Villanova. / Jaime Galindo.

Ana Lahoz

Ana Lahoz

Zaragoza

El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón sigue deshojando la margarita para elegir los terrenos sobre los que se levantará el futuro hospital Royo Villanova, en la margen izquierda de Zaragoza. En ese proceso de esta sí y esta no, hay una parcela que gana muchos enteros para ser la ubicación del centro sanitario.

Según ha podido saber EL PERIÓDICO, se trata de unos terrenos situados junto a la autovía A-23, en dirección Huesca, que están próximos a una gasolinera y situados justo en frente de la entrada principal a la Academia General Militar de Zaragoza. Son parcelas municipales ubicadas un poco más adelante del desvío actual hacia el barrio rural de San Gregorio y el actual hospital Royo Villanova.

Esta zona forma parte del paquete de opciones que el Ayuntamiento de Zaragoza ofreció al Gobierno de Aragón para valorar y estudiar qué ubicación es la ideal para iniciar el proyecto de construcción de esta infraestructura sanitaria. La elección de esta parcela pegada a la A-23 no está cerrada, pero en estos momentos sí es la mejor posicionada. ¿Por qué? Porque además de ser extensa y estar próxima al entorno del actual centro y en la margen izquierda (Sanidad ya dijo en su momento que esto era inamovible), su localización hace que la llegada del tranvía en el futuro sería muy sencilla.

Visto sobre el plano, bastaría con alargar en línea recta las vías del tranvía desde Parque Goya hasta la altura donde estaría el hospital. Con parada prácticamente en la puerta del centro. Y, en este sentido, hay que recordar que la DGA ya recalcó que mejorar la accesibilidad al futuro Royo Villanova iba a ser una necesidad casi imperiosa.

Las parcelas descartadas hasta ahora

Antes de poner el foco en estos terrenos próximos a la autovía A-23, desde la consejería de Sanidad que dirige José Luis Bancalero se han estudiado otras opciones como posibles ubicaciones del hospital. Algunas se han descartado porque ya tienen inquilinos, otras porque el terreno era pequeño o los accesos complicados y otras, básicamente, porque funcionalmente no cumplían con los requisitos.

Por ejemplo, según ha podido saber este diario, se barajaron los terrenos del DAT Alierta donde, finalmente, se instalará la nueva sede del Circe (Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos). Se trata de una zona situada entre Ronda de Boltaña y Las Majas de Goya, junto al tranvía, y que ya tiene un proyecto diseñado por Idom. Descartado entonces para el Salud.

Tampoco se contempla levantar el futuro Royo Villanova en los terrenos próximos a la rotonda de la MAZ, a la salida de Zaragoza en dirección a Huesca, básicamente porque estos terrenos municipales ya están reparcelados. Descartado también.

Otra zona que el ayuntamiento zaragozano ofreció a Sanidad -el concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, habló hace unas semanas de que les habían planteado «tres o cuatro opciones» a la consejería- se sitúa un poco más al norte de donde se encuentra el actual Royo Villanova. La zona es amplia, pero se ha descartado porque los accesos y salidas serían complicados para pacientes, profesionales y ambulancias.

Un cuarto lugar que se ha contemplado pero que, finalmente, se ha desechado es el situado en unas parcelas colindantes al campo de maniobras de San Gregorio. Son unos terrenos situados cerca de la sede del Circe, en el Dat Alierta, en una zona donde hay una instalación de los tranvías. Por espacio, la superficie se quedaría pequeña para acoger el proyecto del Royo Villanova y, además, es probable que se tuviera que hablar con el Ministerio de Defensa por la titularidad de una parte de las parcelas, que no todas son municipales.

Las parcelas están próximas a una etación de servicio de Cepsa.

Las parcelas están próximas a una etación de servicio de Cepsa. / Jaime Galindo.

Con todo ello analizado, y teniendo en cuenta que la consejería de Sanidad trabaja mano a mano con los departamentos de Fomento y Hacienda para tomar la mejor decisión, los terrenos ubicados al lado de la autovía A-23, próximos a la estación de servicio de Cepsa, son los que ahora tienen más opciones de convertirse en la sede del futuro Royo Villanova. En cualquier caso, la puerta no está cerrada y se siguen buscando opciones.

¿Cuándo se tomará la decisión? En principio, y teniendo en cuenta los plazos, la elección del lugar donde se levantará el edificio sanitario se tomará este año. Al menos, esa es la previsión con la que se trabaja en Sanidad para, a principios de 2026, poder lanzar ya las primeras licitaciones del proyecto y entre 2026 y 2027 iniciar las obras. La idea inicial es que el hospital pueda estar ya en funcionamiento para 2030.

Se llegará hasta los 700 aparcamientos

Otro punto a favor que tendrían estas parcelas a pie de autovía radica en la proximidad con el actual Royo Villanova y con un terreno situado un poco al norte del centro sobre el que ya se ha puesto el ojo como posible zona de aparcamiento. Precisamente, las plazas de parquin son un debe en la zona, ya que la falta de espacios es un problema para pacientes, familiares y trabajadores. Y con el nuevo hospital se quiere llegar hasta los 700 aparcamientos, una cifra considerable que podría alcanzarse echando mano también de parcelas próximas a los terrenos citados.

El proyecto para construir un nuevo Royo Villanova es uno de los más importantes de cara a los próximos presupuestos porque, en su conjunto, se habla una inversión que comprometerá al menos 200 millones. El Salud ha descartado llevar a cabo una rehabilitación integral del actual edificio porque construir uno nuevo es más sencillo por operatividad, ya que no se tendrán que cerrar espacios, ni derivar pacientes ni reorganizar servicios al no tener que compaginar las obras con la actividad asistencial en el hospital. Esto permitirá también acortar los plazos de los trabajos.

Tal y como desgranó hace unas semanas este diario, otro de los motivos para crear un hospital nuevo y no hacer la reforma del actual es que la fachada del Royo está protegida y eso limita las posibilidades arquitectónicas. La obra, en este caso, ya no se podría empezar de cero, sino que tendría que respetar la estructura.

Además, el hospital actual tiene unas limitaciones de superficie incompatibles con las normativas y las necesidades asistenciales sanitarias del siglo XXI. Por tanto, debe ampliarse en superficie (el proyecto contempla que se duplique su capacidad) y ahí es donde se topa con otro problema: su entorno. ¿Hacia dónde debería crecer el hospital? ¿Hacia la zona de pinar (inviable) o hacia el aparcamiento, ya de por sí escaso?

Tracking Pixel Contents