RETO DE SUPERACIÓN PERSONAL

María Ciudad conquista el campo base del Everest

Pese a los obstáculos en el camino, María alcanzó su meta.  | SERVICIO ESPECIAL

Pese a los obstáculos en el camino, María alcanzó su meta. | SERVICIO ESPECIAL

ALEXIA PAVÓN

María Ciudad, ejeana de Bardenas, sigue dando visibilidad a su causa y a las enfermedades que padece, como la fibromialgia, superando nuevos retos en su medio favorito, la montaña. Esta vez, con una de las rutas más duras a las que se ha enfrentado, hacia las faldas del pico más alto del mundo, el campo base del Everest.

La travesía comenzó el día 1 de noviembre, cuando María y el resto del equipo viajaron hasta Katmandú, Nepal, desde donde se transportaron hasta el aeropuerto de Lukla, para finalmente llegar a la cordillera del Himalaya y comenzar la expedición.

Un camino que no fue nada fácil debido a sus problemas de salud. María cuenta que tuvo que lidiar con un dedo roto, un desgarro muscular con costilla rota y un gran resfriado que se sumaron a las condiciones propias de la montaña, como el desnivel o la falta de oxígeno. Sin embargo, la montañera afirma: «A la hora de andar cambiaba mi mente e intentaba disfrutar del camino y llegar a mi propósito».

Pese a los obstáculos, nada impidió que el 17 de noviembre finalmente llegaran a su objetivo. «A pesar de todo, disfrute mucho el camino y cuento con la gran satisfacción de haberlo conseguido. Esto me ha servido para seguir aprendiendo y para hacerme más fuerte, física y mentalmente», expresa María.

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