SEMANA SANTA EN ARAGÓN

El Silencio sacará un restaurado Señor de la Agonía que rejuvenece y pierde autoría

La parroquia de San Pablo restaura el titular de la cofradía del barrio del Gancho. La imagen se data en el siglo XVIII y se desconoce quién pudo tallarla

Detalle del rostro del Cristo de El Silencio.

Detalle del rostro del Cristo de El Silencio. / MIGUEL ANGEL GRACIA

La pasada Semana Santa la cofradía de El Silencio, anclada en el popular barrio zaragozano de El Gancho, temió por su titular Cristífero. El Señor de la Agonía presentaba una importante grieta en el brazo izquierdo. Un problema que ha solucionado la propia parroquia de San Pablo, sede canónica de esta hermandad, que lo ha restaurado y que ha descubierto importantes novedades que, obviamente, no modificarán la devoción que se tiene a la imagen. 

El Cristo lucirá una imagen más limpia, ya que se han retirado los efectos del humo de las velas y de la suciedad del paso del tiempo, y con pigmentación recuperada, el Jueves Santo con su procesión del Silencio. Así lo destaca Sergio García, responsable de patrimonio del templo parroquial, quien destaca que presentaba un estado «muy dañado en algunas zonas, llegando a tener barnices y pigmentos oxidados», así como grietas, especialmente, en la zona de las axilas. 

"Es una imagen con gran valor patrimonial y devocional por lo que decidimos que había que tomar cartas en el asunto lo antes posible", afirma García, quien añade que decidieron apostar por el mismo restaurador que intervino el pasado año en el rostro de la Virgen del Rosario o, como se denonima popularmente, la Virgen blanca, realizada en 1953 por Jacinto Higueras Cátedra. Por tanto, la parroquia le encargó los trabajos al aragonés Isaac González. "Es un gran profesional que ha trabajado antes en El Pilar y La Seo y confiamos plenamente en él". 

"No va a parecer otro, eso no queríamos", afirma Sergio García, sino que lo que se ha hecho ha sido "consolidar la estructura de la talla, eliminar repintes que se habían hecho a lo largo de los años de una forma muy poco profesional y fijado la policromía". Un detalle que han querido mantener es el desgaste en los pies como consecuencia de los gestos de cariño de los fieles que acuden a la capilla en la que está al culto. "Demuestra que es un Cristo con una historia detrás y eso no se puede borrar, todo lo contrario, hay que ponerlo en valor". 

El cristo restaurado.

El cristo restaurado. / MIGUEL ANGEL GRACIA

Más joven y sin autoría

Pero la restauración ha guardado una sorpresa. El Cristo de la Agonía se databa en 1588 y se atribuía a Jerónimo Nogueras, a partir de determinados documentos hallados en el archivo de la parroquia y de la cofradía, pero el estudio realizado por el restaurado ha sacado a la luz que lo que se creía no es así. 

La talla ha dejado de tener autoría, pues no se ha descubierto firma alguna y se le han restado un par de siglos, pues ahora se fija su hechura en el XVIII. 

"Nos hubiese gustado que se confirmara lo que se venía diciendo, pero hay que reconocer que algunas formas no cumplían con los cánones del siglo XVI. No obstante, esto no rebaja el valor que tiene esta talla en la Semana Santa de Zaragoza y en los fieles que todos días bajan las escaleras de San Pablo para ir a verle", afirma García. 

En ello coincide la nueva hermana mayor de la cofradía de El Silencio, Eva María Oriol, quien destaca que "lo importante es lo que significa para todos nosotros".

El Cristo de la Agonía en la iglesia de San Pablo.

El Cristo de la Agonía en la iglesia de San Pablo. / MIGUEL ANGEL GRACIA

"La pasada Semana Santa cuando lo volvimos a poner en su capilla vimos que estaba muy deteriorado y debo de agradecer al párroco Santiago Fustero que no dudara ni un segundo en decir que asumía los gastos". 

Oriol asegura que con esta intervención "habrá que repensarse determinadas salidas en las que hay previsión de lluvia. Lo que está claro es que es una joya artística que debe perdurar y no podemos echar por tierra el trabajo que se acaba de hacer". 

Esta cofradía nacida de Acción Católica en 1944 sacará a la calle el próximo Jueves Santo y en el Santo Entierro del Viernes el renovado señor de La Agonía en el que destaca su mirada directa al cielo.