La incertidumbre va a marcar el inicio de la competición oficial del Casademont Zaragoza. Así lo reconoció Jaume Ponsarmau, técnico del equipo, en la rueda de prensa previa al debut del conjunto zaragozano, mañana ante el Manresa. «Somos un poco incógnita. Teníamos muchas ganas de empezar la competición en nuestra casa, pero la verdad es que os tengo que hablar de incógnitas porque en una semana nos hemos tenido que redescubrir», reconoció el entrenador.

Repasando la cargada enfermería maña, a las ya conocidas bajas de larga duración de Yusta y Cook, Ponsarnau reveló que la participación de San Miguel y de Stan Okoye está en entredicho ya que aunque no tienen molestias graves, les están impidiendo entrenar al 100% con el resto de compañeros. «El último entrenamiento antes del partido va a ser clave para decidir», apuntó.

 Por otro lado, el técnico elogió la rápida adaptación tanto de Waczynski como de Sipahi. «La integración de Adam a nivel técnico está siendo buena porque es un jugador inteligente con cultura ACB. Kenan (Sipahi) ha entrenado hoy, es un chico inteligente y nos va bien que también tenga experiencia en España Es un chico valiente y el que lo tengamos aquí con nosotros es una muestra de máxima ambición por su parte. Creemos que se va a adaptar pronto», explicó Jaume Ponsarnau sobre su último fichaje.

Ante la posible falta de centímetros en la plantilla y de los problemas en el rebote que se han visto en pretemporada, Ponsarnau cree que encontrarán una solución pronto. «No creo que vayamos a ser un equipo bajo. Asumo una responsabilidad identificando roles en el rebote ofensivo y en el defensivo, al no tener claro cómo tenemos que hacerlo por los cambios que ha habido durante la pretemporada, se ha descuidado un poco ese trabajo. Si queremos competir contra Manresa, tenemos que mejorar en eso», reconoció el técnico del Casademont.

El preparador catalán asume que el encuentro ante los catalanes va a ser un partido «difícil», equipo al que considera que han llegado jugadores «con mucho talento» y que tiene un gran entrenador. «Sorprendentemente han encontrado muy pronto un nivel competitivo pese a las novedades de la plantilla», señaló.

Ante el regreso del público al Príncipe Felipe, Ponsarnau se mostró encantado de poder volver a jugar «con y para» la Marea Roja y finalizó mandando un mensaje a la afición: «Pedimos un poco de paciencia hasta que todo se empiece a engranar. El espíritu es bueno y se trata de dar máxima confianza a nuestros jugadores para que puedan dar todo el baloncesto que tienen, pero al público le digo que esto va a funcionar», concluyó.