El Casademont Zaragoza dio el primer paso con su buena victoria ante el Baxi Manresa y este jueves quiere dar el segundo en Bilbao, en la segunda jornada de Liga, 48 horas antes de la tercera. El equipo de Jaume Ponsarnau despejó las incógnitas del verano siendo mejor que su primer rival y su siguiente objetivo no es otro que ser también mejor que su oponente de este jueves (19.00 horas) para seguir sumando buenas sensaciones y, sobre todo, victorias en la clasificación.
No ha habido mucho tiempo para mejorar grandes cosas ni introducir conceptos nuevos y el técnico ya dijo tras ganar al Manresa que esa labor iba a centrarse en cómo superar al Surne Bilbao, un rival que va a exigir cosas diferentes al Manresa y que busca su primera victoria en casa. Será el primer desplazamiento para el Casademont y el primer partido de Liga Endesa en el que va a tener público enfrente (un máximo de 4.000 espectadores) después de más de año y medio.
Al menos Ponsarnau asegura haber recuperado ya a San Miguel al tiempo que Sipahi ha podido integrarse más en el equipo. El técnico se mostró optimista con respecto a las posibilidades del equipo aunque también sabe que tiene mucho camino por delante. El Casademont tiene mejor cara que antes de empezar la temporada tras la primera victoria y la recuperación de jugadores. Enfrente. Álex Mumbrú, espera que el Surne Bilbao tenga algo más energía que el pasado sábado en Badalona, donde cayó «por pequeños detalles» frente al Joventut en el primer encuentro del curso.
«No estuvimos a nuestro nivel de actividad normal, estuvimos algo más lentos y escasos de energía y a ver si mañana cambiamos esto», dijo Mumbrú, desvelando ciertos problemas físicos del base brasileño Rafa Luz y el escolta Tomeu Rigo. En cuanto al rival, consideró al Casademont «un gran equipo», aún con la lesión de Omar Cook, baja que ha compensado con Kenan Sipahi. «Tiene por fuera a San Miguel, Okoye, Mobley y Waczynski y por dentro a McLean, Radoncic, Hlinason y Vanwijn», destacó de la plantilla que dirige Jaume Ponsarnau.
El Surne Bilbao también ha cambiado con respecto a la pasada temporada. Perdió jugadores de peso, sobre todo el pívot Ondrej Balvin, aunque se ha reforzado con nombres interesantes como Ángel Delgado. El dominicano protagonizó su explosión la temporada pasada, cuando vestía la camiseta del Estudiantes, precisamente contra el Casademont en el Príncipe Felipe, capturando 20 rebotes. Su defensa y el trabajo en los rechaces será una de las claves para el equipo aragonés.
Los otros nombres nuevos con los que cuenta Álex Mumbrú en su segundo proyecto son el veterano base Rafa Luz, el escolta Andrew Goudelock, los aleros Valentín Bigote y Álex Galán, el ala-pívot Gytis Masiulis y el también pívot Jeff Withey. En su estreno cayeron en Badalona por 85-79 en un duelo muy ajustado y su objetivo es sumar victorias y hacerse fuerte en casa para no sufrir por salvar la categoría como la temporada pasada.
El Casademont tampoco quiere repetir el curso precedente, para lo que también debe sumar victorias desde ya porque esta temporada todos los equipos de la Liga Endesa han completado plantillas muy competitivas y, salvo los grandes clubs de siempre, entre el resto se presume una gran igualdad. El Casademont va paso a paso, hoy toca el segundo.
