Dino Radoncic, jugador del Casademont Zaragoza, repasó la actualidad del equipo en lo días previos a recibir, el sábado, al Real Madrid en el Príncipe Felipe. «Llega a Zaragoza uno de los mejores equipos de Europa. Sabemos lo difícil que será ganarle pero con trabajo, dando el máximo y con el empuje de nuestra afición intentaremos sacar la victoria», señaló el jugador balcánico.

El ala-pívot destacó que en el conjunto que entrena Pablo Laso hay «muchos jugadores a muy buen ritmo» e igualmente resaltó que ha perdido «pocos partidos» tanto en ACB como en la Euroliga.

El internacional por Montenegro, que ha estado concentrado en estas ventanas con su selección, se mostró orgulloso por los resultados que ha obtenido en los partidos duelos internacionales. «Hicimos un buen trabajo y cumplimos con nuestros objetivos», apuntó, aunque Radoncic también demostró no haber desconectado de su trabajo con el Casademont. «Mientras estaba allí me mandaron las jugadas nuevas y he intentado estar muy metido». A pesar de la carga física de partidos en pocos días, el deportista aseguró que está preparado para dar el máximo de cara a afrontar bien el partido ante el Real Madrid

Radoncic es consciente de que  el Casademont Zaragoza ha perdido en las dos últimas jornadas y que frente al conjunto madrileño deben «dar más» y demostrar que están metidos en la competición, a la vez que se mostró «convencido» de que «las cosas van a empezar a salir bien».

Igualmente ,consideró muy importante el apoyo de la «marea roja», la afición del equipo, a la que calificó como «el sexto jugador». «Sin ellos no haríamos nada. Cuando venía de visitante y me encontraba siete u ocho mil personas era muy difícil ganar. Estoy seguro de que el sábado será un buen día, que nos apoyarán y que solo así podremos sacar la victoria», finalizó el jugador montenegrino.

La plantilla del Casademont sabe de la dificultad del reto de jugar ante el Real Madrid pero ve el encuentro ante el equipo de Pablo Laso como una oportunidad para reivindicarse tras su irregular inicio de temporada. Una hipotética victoria serviría a los aragoneses como punto de inflexión y supondría una tremenda inyección de moral para afrontar el resto de competición liguera.